No más mitos: el yoga también es para hombres y ayuda a tener mejores encuentros sexuales

Sentirse bien ha sido, en los últimos años, una parte fundamental del estilo de vida de las nuevas —y no tanto— generaciones: las inscripciones a los gimnasios y clases deportivas han ido en aumento un 20 % por año, y se estima que en el 2020 tenga una muestra de hasta el 200 %.

De entre todas las ofertas que estos centros pueden darnos está una que se ha calificado en muchas ocasiones como “para mujeres”: el yoga.

Esta práctica milenaria nacida en la India ha tenido un auge desde hace muchas décadas, cuando distintos yoguis indios trajeron a occidente sus estilos particulares, como Pattabhi Jois, quien popularizó el Ashtanga Yoga primeramente en los círculos más elites de Los Ángeles, y que se fue expandiendo a todos los rincones del mundo.

El yoga, al ser una disciplina que tenía en su origen una conexión directa con la religión hinduista y sus diversas ramificaciones, siempre ha tenido de por medio el ritual físico para llegar a una conciencia elevada del ser, pues un cuerpo sano y entrenado da acceso a mayor conocimiento a través de su bienestar y preparación.

Sin embargo, con el paso del tiempo y los diversos estilos que se han desarrollado, las investigaciones sobre sus efectos positivos más allá de la tradición filosófica, que no es poca cosa, se han hecho del dominio público y más gente, tanto hombres como mujeres, se han aliado a esta práctica que nos ayuda a estar saludables.

Una de las grandes lecciones que el yoga nos brinda es estar en el aquí y el ahora, y eso podemos trasladarlo a cualquier actividad que realicemos, desde leer un libro hasta llegar a un orgasmo.

Yoga…aaaahh!

Si bien la práctica tradicional y ligada a la filosofía no tiene una finalidad carnal, los beneficios físicos son innegables y puedes utilizar lo aprendido a tu favor y el de tu pareja; algunos de los beneficios que encontrarás en el yoga para usar en tu vida sensual y sexual, son:

Mejores erecciones

El buen flujo de sangre a través de nuestro cuerpo es fundamental para que la excitación sea la mejor, así como un cuerpo con fuerza abdominal y control de la respiración, por lo que posturas como Navasana (bote), Kumbhakasana (plancha alta) y Setu Bandha Sarvangasana (puente) ayudarán a que respires mejor, la sangre fluya al área abdominal y pélvica, además que estimula los músculos perineales.

Mayor control para llegar al orgasmo en el momento preciso

Fact: Los hombres tienen más facilidad para llegar al orgasmo que las mujeres; nosotras necesitamos más tiempo y estimulación, por eso no es extraño que algunos estudios y encuestas internacionales muestren que sólo entre el 3.3 % y el 20 % de las mujeres llegan. Poder escuchar a tu pareja y controlar tu eyaculación pueden lograr la diferencia entre un encuentro más y uno que los haga gritar.

En el yoga existen algunos “candados” o bandhas que se deben trabajar para obtener todos los beneficios internos y externos de las posturas, respiración y ejercicio cardiovascular (y evitan lesiones).

Mula Bandha es un área que se encuentra en la base del tronco, con el perineo y los órganos sexuales. Para activarlo y tener sensaciones mucho más desarrolladas hay que absorber, llevar hacia arriba y adentro el perineo, suelo pélvico, y activar los músculos en la exhalación.

Este movimiento lo que hace es contraer el perineo, permitiendo que no acabes si aún no es momento, y practicarlo hará al maestro. Sí, también ayuda en el tema de la eyaculación precoz.

Sensaciones fuera de esta realidad

La respiración es un eje fundamental del yoga; la energía vital que tenemos en el interior “despierta” a través de nuestra respiración. Hacerlo de manera correcta, llenando nuestros pulmones por completo, estimulando el calor corporal por medio de ella a consciencia, logrará que seas dueño de tus impulsos y tengas sensaciones increíbles junto a tu pareja.

No todo es llegar al orgasmo, sentir la piel, el roce de los sexos, la saliva, las manos… todo está en el paquete y es importante. Así que poner atención a los detalles sensoriales puede hacerte sentir más placer del que imaginas.

Un ejercicio básico muy bueno es que cuentes el tiempo de tus inhalaciones, retengas y exhales en el mismo tiempo que respiraste. Puedes comenzar con tiempos de 4 segundos para respirar, 2 segundos retienes el aire y en otros 4 lo sacas, y vuelves a comenzar, así durante unos 10 minutos. Eso también te relajará y liberará el estrés, primordial para estar atento y en el mejor mood para hacer todo lo que deseen en la cama.

Este 21 de junio se celebra el Día Internacional del Yoga, y es sólo un pretexto para contarte sobre unos de los muchos beneficios que pueden llevar a tu vida.