V Rod: ¿Estás listo para el Porn-Trap?
Quizá la hayas conocido como Veronica Rodriguez. Solía ser una estrella porno que rodó miles de escenas para adultos. Hoy se ha retirado definitivamente de la industria y comenzó a labrarse un camino en la música con el nombre de V Rod.
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Su más reciente track lleva por título “Putería Time”, que de forma explícita recuerda a su experiencia en la industria del sexo. Se trata del segundo sencillo que lanza con WK Records, después de “Mala”, que estrenó junto a Lil Pump el año pasado.
Platicamos con V Rod a propósito de superar el pasado a través del arte.
¿Cómo entraste en el mundo de la música?
Cuando me retiré del porno, traté de hacer comedia y no me fue muy bien. Pero tenía una cuenta con más de 3 millones de seguidores cuando me retiré de la industria para adultos, así que pensé: ¿Qué voy a hacer ahora que con todos esos fans?
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Así que empecé a ir al estudio y me gustó mucho la música. Aprendí a cantar y una compañía me firmó. Tengo más de 60 canciones y ya empezamos a sacar las primeras.
¿Tenías experiencia?
Cantaba en la ducha, pero ya estaba harta de mis loqueras. Empezaba a ir la iglesia porque mi mamá quería que yo trabajara en mi sanación espiritual y mi conexión con Dios, porque como venía de la industria para adultos, pensaba yo estaba muy perdida.
¿Por qué te retiraste de la industria para adultos?
Fui una de las top pornstars y por más de ocho años hice más de 1,500 escenas. Ahora estoy tratando de hacer la transición hacia la música.
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Estoy sanando mentalmente con mi familia y con su religión, porque mi mamá es mujer cristiana. Fue ella quien me hizo una intervención: “te tienes que salir de esa industria”, me dijo.
Ahora quiero ser un ejemplo para todas esas niñas de mi edad que están en esa industria, para que sepan que pueden encarrilar su vida.
Sin embargo, ´Putería Time’ es una canción que podría considerarse como “porno”, por frases como “me gusta cuando te vienes” y “te voy a dar un beso en la cabecita”, ¿eso no dificulta poderte separar de la industria?
Exacto. Pero también tengo otros temas que son mucho más comerciales, canciones de trap en inglés y español.
“Putería Time” la hice en 2018. Se lo tuve que explicar a mi mamá también, porque me dijo que no le gustaban las líricas, que estaba muy fuerte el tema.
Pero la disquera pensó en sacar este tema porque es un denbow y ahorita está pegando mucho el denbow.
¿Pero al final cantar sobre tu sexualidad no representa también una forma de empoderamiento?
Sí, la diferencia es que ahora lo hago por medio de mi lírica. Antes yo hacía un performance, actuando delante de la cámara. Ahora puedo hacerlo por medio de líricas y me encanta.
En México por lo menos a esa palabra ya se le reconoce como trabajo sexual.
¡Sí! Después de que saqué el tema, vi los comentarios de los fans. Pude ver, literalmente, el impacto que tiene en nuestros fans todo lo que hacemos.
Soy consciente de que mis letras que son muy fuertes, obviamente, pero son parte de lo que hice en el pasado.
¿Te gustaría contagiar a otras chicas la seguridad en su cuerpo?
Sí, porque es un problema que tenemos todas las mujeres y todas las niñas de mi edad. Tenemos muchas inseguridades, pero con los años he conseguido sentirme bien conmigo misma y mi físico. Incluso como estrella porno estaba muy acomplejada, porque trabajaba mostrando mi cuerpo. Incluso tuve que ir una terapeuta para que me ayudara a entender y amarme.
¿En dónde naciste?
Nací en Venezuela y estuve allá hasta los 12 años. Mi mamá se casó con un gringo marine que era quiropráctico, así que nos trajo a los Estados Unidos a mis 13. Nos instalamos en en Chicago durante cinco años.
Después, mi padrastro quiso vender su clínica y retirarse. Y como el sueño de todo el mundo era retirarse a Miami o Arizona, él se decidió por Miami.
¿Siempre te gustó el reggaetón?
Sí, como soy de los noventas, crecí escuchando a Daddy Yankee. Pero también crecí en la era de Shakira, Britney Spears y Christina Aguilera.
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¿Cómo fue tu experiencia con Playboy Plus el año pasado?
¿Cómo lo conseguí? Fue por la mamá de Bella Thorne, porque somos muy amigas y trabajo con ella para OnlyFans.
Su mamá me dijo que conocía a la gente de Playboy en California, y que ellos ponerme ahí, ¡fue increíble porque vestí el traje rosa de Conejita!
¿Cómo te va en OnlyFans?
Cuando me retiré de la industria, hablé con mi mamá y con la disquera. Les dije que necesitaba quedarme con mi OnlyFans, porque ellos habían hablado de cerrarme la cuenta, pero es que yo hago mucha plata, entre 30 y 50,000 dólares mensuales. Es la plata que invierto en mi música y mis estudios, así que aceptaron.
Es muy difícil borrar la huella digital y aunque te hayas retirado, habrá quien googlee cosas y encuentre las escenas porno que hiciste en el pasado. ¿Eso te atormenta?
Es algo de lo que hablo mucho con mi terapeuta y mi mamá. Estoy clara de que es algo que me marcó de por vida y estoy pagando las consecuencias.
Pero al final he sanado y me di cuenta de que mi experiencia servir como ejemplo a todas esas niñas que quieren ser pornstars, strippers y webcam girls para que entiendan lo dura que es la vida cuando lo dejas.
