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¿Cómo es una relación sexual cuando se tiene autismo?

Por: Soraya Villanueva 10 Abr 2024
Existen muchos tabúes en torno a el autismo, y más si se habla de sexo, por ello, la  Neuropsicóloga Daniela Ordoñez nos explica cómo la comunicación puede transformar la experiencia en el dormitorio
¿Cómo es una relación sexual cuando se tiene autismo?

En un mundo donde las conversaciones sobre el autismo a menudo se centran en las dificultades que enfrentan las personas en el espectro, es importante reconocer y celebrar la diversidad de experiencias, incluida la sexualidad.

Y es que a pesar de los desafíos que pueden surgir en el ámbito de las relaciones interpersonales, se ha demostrado que personas con autismo encuentran que su neurodiversidad puede ser un activo en el dormitorio, brindando una perspectiva única y sensibilidades sensoriales intensificadas que pueden enriquecer su vida sexual.

El Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, la Neuropsicóloga Daniela Ordoñez señala que para aquellos que se encuentran en el espectro del autismo, entender y abrazar su sexualidad puede ser un viaje personal de autodescubrimiento.

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“A menudo, las reglas tradicionales de la conexión interpersonal pueden resultar desafiantes, pero esto no significa que no se pueda disfrutar del sexo de manera plena y satisfactoria. Al contrario, la hipersensibilidad a ciertos estímulos sensoriales puede agregar una capa adicional de emoción y placer a la experiencia sexual“.

La hipersensibilidad en el autismo 

Primero, es importante destacar que el diagnóstico de autismo a menudo llega tarde en la vida, lo que puede llevar a una falta de comprensión y aceptación de las diferencias individuales en la sexualidad. Por ello, Daniela menciona que, “reconocer y aceptar que la sexualidad propia puede ser diferente de la de los demás es un paso crucial hacia la exploración y el disfrute pleno del sexo”.

Y si a ello sumamos que existen muchos tabúes en torno al autismo, hablar de sexo y autismo puede llegar a ser complejo para algunas personas. En muchas ocasiones se tiene la idea errónea de que una persona dentro de este espectro no es funcional.

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“En primer lugar se tiene que conocer a detalle qué es el autismo y lo grados que hay dentro de éste, porque ninguna persona que lo tiene es igual a otra y contrario a lo que se podría pensar existen muchos individuos con autismo que son funcionales. La idea de que una persona autista es carente de muchas funcionalidades es equivocada”, explica Ordoñez.

¿Cómo se puede llevar una vida sexual teniendo autismo?

Así como lo menciona la Neuropsicóloga la hipersensibilidad es un factor importante en quienes padecen autismo; hay quienes puedan resultar beneficiados en el aspecto sexual, pero otros no. Todo dependerá de cada persona.

“Para maximizar el placer sexual en el espectro del autismo, es importante tener en cuenta y disfrutar de las sensibilidades sensoriales durante el acto sexual. Muchas personas autistas experimentan fuertes reacciones a los sonidos, imágenes, sensaciones, sabores y olores, lo que puede afectar tanto positiva como negativamente su experiencia en el dormitorio”, explica.

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“Comunicarse abierta y honestamente con la pareja sobre estas sensibilidades puede ayudar a garantizar una experiencia sexual cómoda y placentera para ambas partes”, añade.

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Ningún autista es igual a otro

En segundo lugar, es importante recordar que las sensibilidades sensoriales pueden variar ampliamente de una persona autista a otra, por lo que es fundamental estar atento a las necesidades individuales de la pareja durante el sexo.

“Algunas personas pueden disfrutar de ciertos tipos de estimulación sensorial, mientras que otras pueden encontrarla abrumadora o incluso desagradable. Respetar los límites y las preferencias de la pareja es esencial para crear un ambiente de confianza y comodidad en el dormitorio”, menciona Daniela.

Además, es importante tener en cuenta que las sensibilidades sensoriales pueden experimentarse fuera del dormitorio, lo que puede afectar el estado de ánimo y el deseo sexual de la pareja. La sobrecarga sensorial en entornos cotidianos puede requerir tiempo y espacio para relajarse y recuperarse antes de estar listo para participar en actividades sexuales.

Por consiguiente, la sexualidad en el espectro del autismo es diversa y única, y puede ser una fuente de placer y conexión significativa.

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Consejos para una sexualidad plena en el espectro del autismo

Entender y abrazar la sexualidad en el espectro del autismo es fundamental para una experiencia sexual satisfactoria y enriquecedora. Aquí te presentamos algunos consejos prácticos para maximizar el placer y la conexión en el dormitorio si tu o tu pareja padecen de este trastorno del neurodesarrollo.

Comunicación abierta y honesta

Si experimentas dificultades con ciertos tipos de estimulación sensorial o necesitas tiempo para recuperarte de la sobreestimulación, comunícalo a tu pareja. No tengas miedo de expresar tus necesidades y preferencias en el dormitorio. La comunicación abierta y honesta es clave para una experiencia sexual positiva y satisfactoria.

Abraza la diversidad sensorial

Reconoce y disfruta de tus sensibilidades sensoriales durante el sexo. Para algunas personas autistas, ciertos estímulos sensoriales pueden ser intensamente placenteros, mientras que otros pueden resultar abrumadores. Comparte con tu pareja lo que te gusta y lo que no, y experimenta juntos para descubrir qué funciona mejor para ambos.

Flexibilidad y adaptabilidad

Debes saber cuándo planificar y cuándo seguir la corriente durante el sexo. Si bien la planificación puede ser útil en algunas situaciones, también es importante estar abierto a la espontaneidad y la improvisación en el dormitorio. Recuerda que el sexo casi nunca sale según lo planeado, y eso está bien. Mantén una mente abierta y dispuesta a sorprenderte.

Reduce la ansiedad

Muchas personas autistas luchan por aquietar sus mentes y concentrarse durante el sexo. Si te encuentras ansioso o distraído, prueba técnicas de relajación como la respiración profunda o el uso de una venda en los ojos para eliminar distracciones visuales. Encuentra lo que funciona mejor para ti y comparte tus estrategias con tu pareja.

Explora y experimentar

No tengas miedo de probar cosas nuevas en el dormitorio. Para algunas personas autistas, ciertos estímulos sensoriales, como texturas u olores, pueden ser especialmente reconfortantes durante el sexo. Experimenta con juguetes sexuales, técnicas de BDSM o música para crear un ambiente erótico que te resulte estimulante y placentero.

Comprende y respetar los límites

Al igual que cualquier otra persona, las personas autistas tienen límites y preferencias individuales en el dormitorio. Respeta los límites de tu pareja y comunica claramente tus propios límites y deseos. El consentimiento mutuo y el respeto son fundamentales para una experiencia sexual positiva y saludable.

En conclusión, la sexualidad en el espectro del autismo es diversa y única. Al comunicarte abiertamente con tu pareja, abrazar tus sensibilidades sensoriales y estar dispuesto a experimentar, puedes disfrutar de una vida sexual plena y satisfactoria. Recuerda que no hay una forma “correcta” de tener sexo. lo importante es encontrar lo que funciona mejor para ti y tu pareja.

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Soraya Villanueva Escritora Adicta al té y al ramen. Escribo, cocino, tomo fotos, luego existo.
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