Esta postura está en el kamasutra y es parte de las posiciones que se usan en la enseñanza del sexo tántrico, por lo que es sumamente placentera y sencilla de realizar.
Es excelente para empezar o para el final del coito. Su grado de dificultad es mínimo, no es cansado y es muy útil también para experimentar en diferentes partes de la casa, ya que se puede practicar en el sillón, la cama y hasta en el piso.
Arrodíllate y siéntate sobre tus pantorrillas. Pídele que te dé la espalda y se siente sobre tus muslos para penetrarla.
Una vez que esté sentada, podrás acariciar su clítoris o sus senos mientras besas su espalda y cuello. Tómala de la cintura y conduce sus movimientos o bien, deja que ella tome el control y se mueva de la forma que más placer le provoque.
Como variante puedes recostarte o estar acostado en un sillón o cama y dejar que ella haga toda la chamba, como se ve en la imagen.
Recuerda que siempre que tengas sexo casual o con una desconocida, el uso de condón es obligatorio para evitar una infección.
¡Disfruten!
