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Oye, esto es lo más básico de la lista, deberías estar trabajando en ello ahora.
El aire tocándote el cuerpo, la posibilidad de que los cachen… Sexo en un lugar público es un imperdible.
Conquistar a una mujer que no caerá con tus espantosas líneas de batalla es todo un reto que debe ser logrado.
Debes aprender a darlo y recibirlo. Basta ya de la segregación del sexo oral a plato de segunda mesa.
Sí, nada de “ay pues el elevador que no sirve”.
Pero una buena orgía. Ya eres un hombre, es momento de romper esos tabús.
Cruzar miradas, buscar el lugar y darte. Por eso es bueno siempre cargar con protección.
Y hacerlo, y hacerlo, y hacerlo, y hacerlo
¡Qué 50 Sombras, ni que ñoñadas! El asunto es algo que te asuste… pero te guste.
Una experiencia sexual más allá de cuerpo. ¿Por qué limitarte al orgasmo cuando hay tanto que experimentar?
Esta es una simple lista. Sencilla. Sólo es cosa de ser abiertos, buscar experiencias y entregarse al placer. Con protección y el acuerdo de todos los involucrados, no debe ser tan complejo. Expande tus horizontes. ¿Se te ocurre alguna más?