Lo que no sabes de los condones

Por Rodrigo Álvarez
@ralvmed
El condón de latex es, en definitiva, lo mejor que puedes usar para prevenir efectivamente una enfermedad de transmisión sexual (ETS) o un embarazo no deseado. En la actualidad existen decenas de variedades y tipos y cada vez son más sofisticados, resistentes y más efectivos en cuanto a sensibilidad y placer.
Como es un instrumento básico de la vida sexual y obligatorio en caso de tener relaciones casuales constantes, no está de más que conozcas algunos datos duros y curiosos.
Cuatro tipos básicos
Los hay de latex, de poliuretano (para los alérgicos al latex), de intestinos de cordero —aunque prácticamente es imposible encontrarlos y no protegen de ninguna ETS, aún se fabrican— y los femeninos, que son de reciente creación y un poco menos prácticos, hay que decirlo.
El diseño del siglo
Desde que se inventaron en los años 20, los condones de latex prácticamente no han cambiado en cuestión de diseño, aunque sí en tecnología, resistencia, efectividad y grosor. No afectan la calidad del sexo.
Gracias a las nuevas tecnologías de los materiales, usar o no usar condón es prácticamente lo mismo en cuestión de placer y sensación, por lo que eso ha dejado de ser un pretexto.
Las mujeres son el 50% del mercado
Aunque no lo creas, el 50% de las ventas de condones en el mundo son realizadas por mujeres.
El más grande
La línea de condones más grandes del mercado no es el famoso Magnum, sino uno cuyo nombre es G31 y que sólo sirve para penes del largo de una caja de Pringles, aunque suene a
broma.