Star Wars: El ascenso de Skywalker
May the fans be with you.
Tomar en tus manos una de las más grandes franquicias de las últimas décadas es francamente quedar como el cuetero: la gente se enoja si truenan y se enojan si no truenan, no importa qué bien lo hagas. Así que cuando J. J. Abrams tomó el mando del reinicio de la trilogía sabía lo que le esperaba. Ya lo había hecho con Star Trek, saga en la que el riesgo era que el fandom no lo aceptara (mucho más duro, aunque más pequeño que el de Star Wars), logrando llevar una saga siempre exitosa, aunque no tan popular, a un gran público.
En Star Wars, además de lidiar con los seguidores de antaño, los de los noventa, debía llegar los de este siglo, reforzados con Wikipedia y redes sociales. Amén de los movimientos feministas y reivindicativos. Es como si Abrams caminara sobre una cuerda de menos de una pulga y abajo hubiera un abismo mortal. Al parecer, el final de tal peligro se encuentra cerca.
En esta entrega veremos por fin el enfrentamiento definitivo entre Rey (la mujer empoderada) y Kylo Ren (el millennial berrinchudo). Abrams, tal vez por exigencias del guion o por incluir a todo el universo expandido (que hay que vender muchos muñequitos; digo, “figuras de colección”), tendrá como personaje a Mara Jade, ex mano derecha del Emperador Palpatine, aunque redimida al casarse con Luke Skywalker, con quien tuvo un hijo.
Otra de las cosas que se rumora es que la princesa Leia Organa buscará ayuda para la rebelión en la persona de Lando Calrissian y de Maz Kanata. Lo cual implica que Billy Dee Williams volverá a interpretar a Lando Calrissian, lo que brindará un fan service tan grande como la aparición de Harrison Ford y Carrie Fisher en la primera entrega de esta nueva trilogía. Hablando de Fisher, su muerte implicó otro sobresalto en la filmación de este cierre. Se habló de recrearla digitalmente, pero J.J. Abrams, el director, declaró que no haría eso, que recurriría al material que ya tenía filmado de Fisher en El Despertar de la Fuerza, y con eso cerraría el arco del personaje. No quería más enojo de los fans.
Estreno: 19 de diciembre
Con esa cinta se cierra una etapa en la saga de Star Wars, una que implicó crear una nueva mitología pero siendo fiel a la original. Con este filme veremos si un nuevo fandom ve en Rey y Kylo Ren a sus nuevos y entrañables héroes y villanos. La vara está muy alta, lo único que sabemos es que J.J. Abrams hizo lo mejor que pudo.
