Muhammad Ali, novelista

Por Adán Medellín @adan_medellin
Con ustedes Muhammad Ali, entrevistado por Playboy, en octubre de 1964. Entonces Ali todavía se llama Cassius Clay, no se ha convertido al Islam, no ha sido derrotado y es el bocafloja que empieza a vencer a los grandes pesos pesados de su tiempo. Ali todavía no ha peleado con Frazer ni con Foreman, en lo que serían algunos de los grandes showtimes de la era moderna. Pero Ali es Ali desde entonces. Leo las preguntas de Alex Haley, pero me impresionan más las respuestas. Ali busca en todo momento respeto, eso que le niegan los críticos ortodoxos del pugilato. Dice que siempre le ha gustado ser el centro de atención, que desde niño sus combates estaban llenos de otros niños que esperaban que alguien le quebrara esos labios gordos desde los que hablaba y fanfarroneaba, que su primer pelea fue a los 12 años contra un niño blanco y ganó. Ali dice sin tapujos que quiso saltar desde muy joven al profesionalismo, porque no quería llegar acabado y golpeado a su primera pelea.