“Desde Elvis hasta el perreo, cada baile es contracultural”; Entrevista a EsaMiPau!
EsaMiPau! Este sábado 3 de noviembre te invita a levantar a los muertos de sus tumbas con un reggeatón.
¿Cuándo empezó a llamarte la atención el reggaeton?
Siempre me gustó. Cuando escuché La Gasolina por primera vez, me acuerdo que me dio el típico “me asusta, pero me gusta” y no sabía en realidad qué pensar o si de plano aceptar que me gustaba. La mitad de mis amigas estaban medio escandalizadas con una rola y a mí me llamaba la atención. Aunque cuando escuché “Rakata” se me quedó pegada a la primera, la escuché saliendo de las bocinas de un coche a todo volumen en Nueva York, mientras visitaba a una amiga.
¿En algún momento te invadió el mismo prejuicio que aún prevalece en un sector de la old school acerca del perreo?
Tal vez no tan abiertamente, porque además siempre me ha gustado el doble sentido. Las letras, en lugar de que se me hicieran “corrientes”, me parecían muy divertidas. Sucede también que si estas en un medio donde el reggaetón no es parte del discurso editorial/musical; y además de eso, también hay gente con muchos prejuicios al respecto, pues tú tampoco le das mucha cabida. Aunque eso no quiere decir que yo le entraba a ese juego, solo siento que lo puse en pausa inconscientemente.
¿Te divierte la polémica que un movimiento como éste ha generado en personajes como Aleks Syntek?
No me divierte en lo absoluto. Al contrario, me enoja y me preocupa que tanta gente lo celebre. Me parece que Aleks Syntek es el ejemplo perfecto de los males hipócritas y clasistas que tenemos en México. Es un cuate que ha hecho millones de pesos por un clásico que habla de infidelidades y cuyo video está lleno de culos en primer plano. Los adjetivos con los que se refiere a la gente que escucha reggaetón es un claro ejemplo de una persona clasista y la falta de respeto que le tiene a los artistas de este género enseña sus claros complejos de superioridad y falta interés alguno en conocer diferentes contextos y culturas.
¿Cuál es la diferencia primordial que existe entre la producción de un perreo y una tocada de rock?
A veces es más fácil porque solo se requieren unos CD players y un micrófono, pero recuerdo que para el tercer aniversario de Viernes de Perreo, Álvaro Díaz necesitaba una batería; y aunque teníamos todo los requerimientos, el tiempo de montaje se nos vino encima y terminamos de hacer el soundcheck cuando la gente ya estaba empezando a pagar sus. Los fees de los artistas son muchísimo más accesibles que los de las bandas, y es entendible porque a veces sólo hay que cubrir el trabajo de dos personas (DJ y MC).
¿Qué es lo que destacarías en los integrantes del lineup del siguiente perreo?
Michael G es uno de los talentos más jóvenes al micrófono. Sea solo o en producciones de Uzielito Mix, atrapa al público y con sus letras tiene a todos bailando casi al instante. Respecto a Ruido, su DJ sabe como seguir la fiesta una vez que Michael termina su set. DJ Bekman es un viejo lobo de mar en el perreo a pesar de ser joven. Me consta que llena el cuarto de calor en cuanto se sube, hace que los cuerpos se peguen, las nalgas de sacudan y las morras se adueñen de sus propios movimientos y del cuerpo de sus parejas de una forma súper animal. Maxx Gallo, es uno de mis descubrimientos favoritos, tiene una personalidad medio extrema en vivo, rapea en inglés y en español, sus rimas siempre me sacan una carcajada, y sabe hypear muy bien a su público. La Matapxtxs es una jefa. Su selección es tan dura como su nombre y eso solo corresponde a una morra que tiene la personalidad y el porte para ponerse al “tú por tú” con cualquier hombre en los decks.
¿Puede ser el baile una expresión contracultural?
Cualquier baile moderno que vaya en dirección opuesta a un vals o un “baile de salón” es y será contracultural ¡y qué bueno! Elvis y sus caderas, Kevin Bacon en Footloose, el daggering en Jamaica, el hip hop y el twerk en Estados Unidos, la Lambada en Brasil, o el perreo en México, porque en Puerto Rico y Colombia es algo mucho más común.
