Alimentos afrodisiacos: para comerte mejor
La trascendencia de la alimentación en el desempeño sexual es indiscutible y hoy en día que la salud es de lo más valorado, conviene prestarle más atención. Si quieres mejorar, no solo tu salud, sino también tu potencia y acción en el amor, pon mucha atención a lo siguiente.
Así eran los afrodisiacos en la antigüedad, ¡DE TERROR!
Nacida de la espuma
De acuerdo con Hesíodo, Afrodita (Venus, en la cultura romana), fue creada a partir de la espuma del mar creada cuando Cronos, el hijo de Urano, le corta los genitales a su padre y los arroja al mar. Aunque la escena definitivamente no tiene nada de afrodisíaco, este mito puede ser el detonante de la creencia de que los mariscos son altamente afrodisíacos.
Históricamente, en casi todas las culturas (azteca, maya, griega, romana, anglosajona, china, japonesa e india, entre otras) prevalece la idea de incrementar el desempeño físico, así como el deseo y el placer sexual de sus líderes políticos, miembros de la realeza y guerreros, a través del consumo de ciertos alimentos vegetales y animales. Así, esta búsqueda se ha permeado al resto de la población hasta nuestros días.
Ahora sí, ¿qué comer?
La lista de alimentos a los que se les atribuyen “poderes” afrodisíacos es larga. Sin embargo, hay algunos especialmente populares que aparecen en la mayoría de los listados y cuentan con un robusto respaldo científico.
En primer lugar, los mariscos tanto crustáceos como moluscos siempre han sido considerados como los alimentos que mejor incrementan el apetito y deseo sexual. Esto se debe, muy probablemente, a su alto contenido de zinc, que resulta fundamental para la adecuada producción de espermatozoides y favorece la salud prostática.
Después, los tubérculos como la maca, el ginseng y sus ginsenósidos (Rg1) está comprobado que mejoran la potencia sexual en animales. Aquí destaca también el jengibre, suyo efecto afrodisíaco es incuestionable.
Las hierbas y especias como la canela, la pimienta, la cayena, el anís, las ortigas, el ajo y los espárragos se han utilizado desde hace milenios en algunas de las culturas antes mencionadas para aumentar el deseo y la potencia sexual. Sus efectos están demostrados.
¿Cómo funcionan los afrodisiacos?
Existen diferentes mecanismos debido a los cuales determinados alimentos ayudan a incrementar nuestro placer sexual, potencian el deseo o a mejorar el desempeño físico en el momento del coito.
La comida afrodisíaca afecta positivamente los siguientes aspectos.
• Incrementa el riego sanguíneo, es vasodilatador y eleva ligeramente la Frecuencia Cardiaca y la Tensión Arterial.
• Incrementa los precursores de Neuro- transmisores (Triptófano, Tirosina), responsa- bles de la felicidad y del placer (Serotonina, Noradrenalina y Dopamina).
• Incrementa los precursores de hormonas sexuales como el Colesterol (testosterona, Progesterona y Estrógenos) y de algunos minerales o vitaminas (Zinc, Selenio, Magnesio, Vit. B12, Vit.D3, Coenzima Q10, Ácidos Grasos Omega 3 [DHA y EPA]), indispensables para su fabricación.
Los estudios más confiables sobre la potencia sexual han sido mayoritariamente realizados en animales como el ratón y el conejo. Buscan medir la frecuencia del acto sexual, la firmeza de la erección y la reducción del período de latencia; es decir, la disminución del periodo entre la eyaculación y una nueva erección. Estos parámetros representan el paraíso para aquellos amantes que anhelan faenas mucho más extensas y placenteras.
No olvidar
Desde luego, hay que recordar que el adecuado aporte de nutrientes de una alimentación balanceada y un estilo de vida saludable son los mejores aliados para tener un desempeño sexual satisfactorio.
La palabra afrodisiaco es mucho más que un alimento que favorece tu desempeño. En realidad, se refiera a poner atención a tu dieta mental, tu balance emocional, tu calidad del sueño y, por supuesto, la actividad física que realizas día con día. Solo con el balance adecuado entre estos elementos tendrás una salud completa y así tu apetito, deseo y desempeño sexual alcanzarán su nivel óptimo.
