Técnicas de masturbación para potenciar tus orgasmos

Para algunos es pecado y para otros puede provocar el crecimiento de pelos en las manos. Lejos de estas creencias, la masturbación es natural e incluso benéfica para la vida sexual; no sólo te ayuda a conocer tu cuerpo, también puede prevenir el cáncer de próstata.

A pesar de todos los beneficios, existen diversas cuestiones que pueden hacer de esta actividad algo contraproducente. Desde disfunción eréctil hasta eyaculación precoz, un autoestímulo sin consciencia y desenfrenado no nos hace nada bien.  Por esta razón, existen diversas técnicas de masturbación que pueden enriquecer nuestra vida sexual y la de nuestra pareja.

Usa siempre lubricante

Como todo parece una carrera no siempre se piensa en usar un lubricante y la acción se hace en seco. Esto tiene una gran cantidad de inconvenientes; en primer lugar, hace que el pene se desensibilice debido a que se acostumbra a un estímulo fuerte; por si fuera poco, puede hacerte eyacular con precocidad debido a que la acción verdadera implica un ambiente mojado al que no te acostumbras en caso de hacerlo en seco.

Toma tu tiempo

No se trata de una carrera, es un maratón que debes disfrutar todo el tiempo. Cada sesión debe durar por lo menos diez minutos, toma descansos, disminuye la velocidad y reconoce el momento cuando estés por eyacular. Más duración implica un aumento en el placer y la intensidad del orgasmo; igualmente, te acostumbrarás a durar más y tendrás más confianza en el juego previo y durante la intensa sesión.

Únicamente hazlo cuando estés caliente

Tomar tu computadora para entrar en modo incógnito y tener un buen rato solo porque estás aburrido puede ser uno de los peores errores. Al hacer esto únicamente te estás enfocando en llegar al placer último, enseñándole a tu cerebro que se puede alcanzar en cualquier momento, lo que provoca que el sexo deje de ser especial.

Prepárate para la ocasión, imagina una situación o una persona que te prenda y deja que tu cuerpo comience a calentarse. Una vez que el deseo sea insoportable, deja que tu mano se encargue del resto.

El porno es un lujo

Existe una disfunción eréctil que provoca el porno, o sea, únicamente se puede alcanzar una erección a través de este tipo de videos. Este es el peor escenario, pero si lo empleamos cada vez que queremos masturbarnos, entrenaremos a nuestro cerebro a excitarse únicamente con este tipo de estímulos. Utiliza tu imaginación, intenta excitarte y llegar a un orgasmo sin ningún estímulo visual, una vez que lo hagas estarás en el buen camino. Eso no quiere decir que todo tipo de pornografía sea mala, al contrario, puede ser de gran ayuda, pero hay que aprender a verla y utilizarla. Todo con moderación.

El autoerotismo es una forma en la que conoces a tu cuerpo, acelerar la acción y llegar a la meta en el menor tiempo posible es lo peor que puedes hacer. Date una oportunidad y conoce cada una de tus sensaciones con estas técnicas de masturbación, así podrás mejorar tu rendimiento durante el sexo y tener mejores orgasmos.