Tips de viajero: Viena, la ciudad europea que debes visitar
Te gustará Viena, me decían. Nadie me advirtió que tras una sola mirada se convertiría en una de mis ciudades favoritas del Viejo Continente. Viena es imperial, elegante y moderna. Con tanta belleza, como las capitales más famosas de Europa, pero a un mejor precio.
Es la capital de Austria, que se sitúa en el corazón del continente, en la llamada Europa Central. Es un país que limita con Alemania, República Checa, Eslovaquia, Hungría, Italia, Suiza, Eslovenia y Liechtenstein, así que podríamos decir que hay muchas vías de acceso, tanto por cielo como por tierra.
Yo la visité en el otoño pasado. Llegué a Europa en el vuelo de Aeroméxico desde la Ciudad de México a Ámsterdam, y ahí inicié un recorrido que me llevó hasta Viena y otras ciudades.
Una semana en la bella capital de Austria no fue suficiente para conocerla bien, pero sí para antojarme y desear volver. Me hospedé en un lindo y céntrico departamento de Airbnb, recorrí sus calles y visité templos, museos, palacios y cafeterías, porque quien visita Austria debe probar el strudel de manzana, la tarta sacher y el café vienés.
Imagen cortesía Tips de Viajero
Viena se encuentra a orillas del río Danubio, fue la capital del Imperio Austro-Húngaro y un importantísimo lugar de encuentro para la cultura y la filosofía. Ahí nacieron grandes pensadores y artistas, como Sigmund Freud, Gustav Klimt, la reina María Antonieta, Franz Schubert y Johann Strauss I, entre otros.
La historia de la ciudad y la región es vasta, pero la dejaré a un lado para contarte lo que puedes visitar en esta gran capital con imagen tradicional y aires de juventud.
Afortunadamente mi alojamiento estaba a unas cuantas cuadras de Stephansplatz, punto central desde donde se puede ir a los atractivos más importantes. Ahí está la catedral de San Esteban, un templo de estilo gótico. Sube a sus torres, tanto la norte como la sur ofrecen vistas majestuosas. Además, vale la pena poner atención a los sonidos de la famosa campana Pummerin, que está en la torre norte. Ésta se fundió con los cañones dejados por las tropas turcas al retirarse de Viena en 1683.
Muy cerca de ahí está la que fuera la Casa de Mozart y hoy es un museo que cuenta la historia del prodigioso músico. Y si de museos hablamos, hay varios que debes visitar: el Albertina, con su impresionante colección de obras de artistas como Renoir, Monet, Cezanne, Matisse y Picasso; el Weltmuseumel, donde se encuentra “El penacho del México antiguo”, mejor conocido como el Penacho de Moctezuma; y el palacio de Belvedere, donde está la mayor colección de obras de Gustav Klimt, entre ellas, “El beso”. Por cierto, que en el Weltmuseumel la entrada es gratis para los mexicanos, sólo debes mostrar tu pasaporte.
Cortesía Tips de Viajero
Viena es una ciudad de palacios: Schönbrunn, Belvedere y Hofburg. Todos de impresionante belleza y cuyo recorrido se debe hacer con calma.
En su adoquinado casco histórico está el Palacio Hofburg, residencia de los Habsburgo y uno de los atractivos más importantes de la ciudad. A un costado hay un lugar que no debes dejar de visitar, la Biblioteca Nacional de Austria (Österreichische Nationalbibliothek). Entrar en ella es como viajar en el tiempo o a un mundo de fantasía, porque te transporta al conocido cuento de La Bella y la Bestia. Escaleras, libros antiguos, globos terráqueos… toda una experiencia.
Cortesía Tips de Viajero
La música tiene su espacio protagonista en el Teatro de la Opera de Viena (Straatsoper), que fue inaugurado en 1869 con una obra de Mozart, y aunque parezca mentira a los vieneses los decepcionó, pues esperaban más que ese maravilloso edificio de diseño renacentista.
Luego de empaparte de historia, arte y cultura seguro querrás probar algunas de las delicias que ofertan en la gran cantidad de cafeterías. Algunos establecimientos de Viena son míticos, como el Café Central y el Café Griensteidl, o el divertido Aida Café, donde todo es rosa.
Si las compras de lujo es lo tuyo, debes dirigirte al Graben, una larga calle peatonal con tiendas y boutiques de las marcas de mayor prestigio en el mundo. Durante tu recorrido de shopping no pasarán desapercibidos dos monumentos: la Iglesia de San Pedro (Peterskirche), que es la más antigua de la ciudad, construida en la época de Carlomagno; y la Columna de la Peste (Pestsäule), levantada en 1679 en memoria de quienes murieron por dicha epidemia.
Finalmente, un lugar que siempre visito en cada ciudad es su mercado, y el de Viena es fabuloso. Está cerca de la Opera y lleva por nombre Naschmarkt. Además de productos alimenticios de tantos países, hay muy buenos restaurantes a precios razonables.
Tip: Hay dos tarjetas turísticas en la ciudad. La Vienna PASS, que es conveniente si planeas visitar muchos museos, palacios y otros atractivos; y la Vienna City Card, que tiene varias modalidades. Ofrece descuentos en varios atractivos y la mejor es la que incluye transporte público ilimitado, ideal si harás una visita más relajada a la ciudad.
