Ready Player One: Tetris, el viejo que nunca falla
Mis amigos me miran feo cada que les digo que nos echemos una reta de Tetris. Y es que acomodar piezas mientras van cayendo difiere mucho del concepto que ellos tienen de diversión. A mí en lo particular, desde hace varios años, me parece uno de los juegos más entretenidos que pueda tener en mi biblioteca. Es más, es uno de mis juegos favoritos por excelencia. No por nada es uno de los juegos que prácticamente ha llegado a todas las consolas desde su debut en el Game Boy, sin contar que existen estudios que demuestran que conforme te vuelves experto en el juego, desarrollas funciones cognitivas tales como pensamiento crítico y razonamiento.
Conozco toda clase de datos sobre Tetris: quién fue su creador, el nombre que tiene cada una de las piezas, las jugadas, las formas en las que pueden acomodarse, la singular canción, etc. Mis ojos están entrenados para ver la pantalla completa, identificar la siguiente pieza y pensar en cuál lugar debe acomodarse. Trato siempre de ir uno o dos movimientos adelante del que estoy jugando en ese momento. En verdad, me lo tomo muy en serio.
Cada que algún incauto accedía a la reta, un poco a causa de la presión que ejercía sobre ellos, les ponía una arrastrada digna de xvideos. Sin embargo, me di cuenta muy tarde que si seguía haciendo eso podría quedarme sin quien quisiera jugar conmigo o, peor aún, sin amigos.
Afortunadamente, para dejar en paz a todos a mi alrededor, hace un par de meses descubrí Tetris 99 para Switch. Un maravilloso juego gratuito donde te permiten echar reta contra 99 monitos igual de enfermos que tú para demostrar, de una vez por todas, quién tiene el tetrominó más largo. If you know what i mean…
Cada movimiento cuenta. Cada pieza mal acomodada o fracción de tiempo mal empleada se convierte en un error que puede dejarte fuera de la partida. Tampoco es que sea cuestión de vida o muerte, al final, siempre podrás empezar de nuevo, pero debemos aceptar que ver tu honor pisoteado por 99 extraños de todo el mundo siempre es doloroso.
Honestamente no me ha ido tan mal. Durante mi primera partida quedé en segundo lugar y posteriormente he logrado estar dentro de los primeros 10 lugares. Todos estos años de aislamiento han dado resultado, aunque sea para demostrarle a un montón de ñoños que no soy tan güey para acomodar cosas.
Tenemos Tetris para rato. La sencillez del juego desarrollado por Alekséi Pázhitnov tiene un encanto especial. Es uno de esos títulos al que todos podemos tener acceso, pero pocos llegan a dominarlo.
