El Cuarteto de Nos: “la gente se interesa por eso que se le prohíbe escuchar”

¿Qué es ser normal? Alguna vez me dijeron que si quería definir una palabra podía iniciar enumerando lo que no era: normal no es lo difícil de encontrar, ni es lo inusual, ni tampoco lo extraño. Si queremos aterrizar esta idea lo podemos hacer en el mundo de la música: no es normal que músicos exitosos mantengan un segundo trabajo, ni es normal que una banda cambie constantemente de género a pesar de su éxito y tampoco es muy convencional triunfar globalmente si se inicia en un país de menos de 4 millones de personas.

El Cuarteto de Nos cumplió todos estos hechos “anormales”, en pocas palabras se trata de un grupo raro, como el nombre del disco que les cambió la vida tras veinte años de estar en la industria. Un grupo de amigos que encontró en la música una forma de procesar todo el mundo que se abrió tras la caída de la dictadura en Uruguay y que encontró en la reinvención la clave para mantenerse vigentes.

Tras más de una decena de discos en su haber, Roberto Musso, vocalista y fundador de la banda, no se cansa de redefinir los sonidos de su banda y con su última entrega, Apocalipsis Zombie, lo volvió a hacer. En esta ocasión él, con todo el Cuarteto de Nos, volverá a nuestro país el 24 de marzo en el Plaza Condesa, con un repertorio que se adentrará en su largo catálogo musical y en su más reciente material.

En el marco de esta presentación tuvimos la oportunidad de platicar con Roberto, quien nos confesó los detalles de esa aventura que comenzó como ingeniero de sistemas y terminó en medio del Apocalipsis Zombie.

PB: En tu adolescencia vivían una dictadura y después vieron el cambio, ¿cómo fue esta experiencia?

R: Sí, fuimos de la generación que nos tocó vivir la niñez y parte de la adolescencia durante una dictadura militar. Cuando volvió la democracia en 1984 nosotros estábamos en universidad, fue un tiempo muy efervescente a nivel cultural y artístico, muchas cosas habían sido reprimidas. Yo estaba en la facultad de ingeniería, la primera reunión del Cuarteto fue ahí, en el ámbito universitario, y comenzamos a crecer a partir de ese momento.

PB: En el marco de esta explosión artística lanzaron su primer disco, ¿cómo fue ese proceso?

R: En realidad nuestro primer disco fue en el marco de un movimiento de muchos años, de varias ramas: punk, rock clásico y alternativo. El público ya estaba acostumbrado a este tipo de música; pero como fuimos una banda particular a la larga sobrevivimos a los avances del tiempo.

PB: En buena parte gracias a la reinvención que han hecho constantemente, ¿cuál es la clave para innovarse?

R: Buscar que cada proyecto nuevo tenga su propia vida, tener una energía renovadora es fundamental en particular para un grupo de música. El intentar posicionarnos a nivel creativo y a nivel ejecutivo en distintos ángulos y cada vez buscando la novedad, esa ha sido una de las razones por las cuales seguimos juntos.

PB: ¿No es tentador quedarse en la fórmula que ya les dio éxito?

R: Para nosotros es al revés, creo que tenemos el umbral de aburrimiento muy bajo [risas]; inclusive con los tiempos que corren hoy la gente está buscando (sobre todo el público más joven) cuestiones que les sorprendan. Creo que es un plus que tiene la banda si podemos salir de lo normal y de lo que se toca habitualmente en la música, con esas interrogantes y con ganas de conocer cosas nuevas.

PB: De esta manera se han mantenido vigentes por tantos años, ¿han visto cambiar a su público en este tiempo?

R: Sí, más que nada en Uruguay y Argentina, donde tenemos una carrera más larga. En México y en otras partes de Latinoamérica somos una banda relativamente joven, más o menos nos conocen desde el 2007, incluso ahí hemos notado un cambio desde ese tiempo, ya han pasado 12 años. En Uruguay ya son casi 30 años, de repente nos pasa que en los shows van los padres, los hijos e incluso más pequeños.

PB: Como nos comentas, tuvieron una especie de redescubrimiento en el 2006, pero a pesar de ello seguías trabajando como ingeniero de sistemas, ¿qué te llevó a dejar tu carrera de 20 años por la música?

R: Por acá [Uruguay] lo normal es que un artista tenga otro trabajo para poder vivir [risas], esa es la realidad, es un mercado muy chico al ser solamente tres millones de personas. Nosotros éramos estudiantes universitarios, teníamos nuestras carreras y trabajos a parte, los cuales nos gustaban mucho. La parte de ingeniería me encanta, las matemáticas, la lógica y todo eso, era un gran ambiente laboral y muy bien remunerado, la banda era extra [risas]. Pasó  que en el 2006, cuando salió Raro, empezamos a salir de giras y se nos hizo imposible mantener las dos cosas. Entonces tomamos la decisión, que costó bastante, pero entre todos decidimos apostar por el Cuarteto.

PB: En este sentido, ¿ves una relación entre la Ingeniería y la Música?

R: Totalmente y cada vez más. No es verdad ese mito de que el estudiante de Ingeniería, o al que le gustan las Matemáticas, es frío y sombrío. Siento que los números tienen tal abstracción como como el mundo de las letras, es muy similar el querer alejarse de la realidad. Veo al ingeniero como un ser sumamente sensible.

PB: Volviendo un poco a sus inicios, tuvieron algunos problemas con la censura en diversas etapas de su carrera, ¿cómo fue esta relación?

R: Siempre nos ha pasado, sobre todo en los años noventa y al tocar temas un poco controversiales y que quizás no era habitual que se nombraran en canciones. Tuvimos varias con esos problemas, de hecho intentaron censurar una durante el gobierno democrático. Sin embargo, en realidad causa un efecto inverso: la gente se interesa por eso que se le prohíbe escuchar.

PB: Y en este largo trayecto, ¿ha sido difícil mantenerse juntos?

R: Somos un grupo humano muy fuerte, los lazos que tenemos los creamos desde muy chicos, eso hace que sea más fácil de llevar. La verdad es que somos muy amigos y no se puede desentrañar lo que es la vida personal de lo que ha sido la vida del Cuarteto, siempre algún hecho familiar está relacionado con un show.  También hay que tener muy claro los roles de cada uno y evitar que una discusión artística termine en una personal.

PB: Al final de cuenta crearon El Cuarteto de Nos por amor a la música, no para tener un éxito comercial.

R: Para nosotros nació como un hobby, nos encanta la música y siempre lo vimos como algo aparte a nuestras ocupaciones. Nunca pensamos que esto iba a ser nuestra forma de vida, el motor que movió todo fueron las ganas de mostrar nuestra propuesta, de que la gente se entretuviera en los shows.

PB: Después de todo este camino han llegado a Apocalipsis Zombi, con esta especie de bestiario ambientado en nuestra modernidad, cuéntanos un poco del concepto.

R: Veníamos de un disco más introspectivo como lo fue Habla tu espejo, que tiene una gran cantidad de canciones que se incorporaron muy bien al repertorio y a lo que veníamos haciendo al tocar el nivel emocional de las personas. En Apocalipsis buscamos repartir la acción en distintos personajes, quienes a través de su óptica particular nos describen cómo estamos viviendo como humanidad.

PB: Por último, ¿qué es lo más mágico de tu trabajo?

R: Cómo llegas a las personas, que nuestras canciones estén en la cabeza de gente que las pueda interpretar de una manera o que influyan en su bagaje cultural. Llegar a lugares muy lejanos de Montevideo y que la gente cante las canciones a viva voz, se sienta identificada, que se tatúen las letras. Para mí eso es lo más reconfortante de este camino.