Ferrari F40 celebra 33 años de existencia
A finales de este mes, uno de los modelos más icónicos de Ferrari cumple 33 años de lanzamiento, marcando la historia del automovilismo para siempre.
Interactivo con el conductor, con un manejo visceral que conlleva un gran reto, volviéndolo emocionante hasta los huesos; estas son algunas de las características más representativas del auto más veloz de su tiempo, cuyas competencias directas eran el Lamborghini Countach y el Porsche 959.
Una última creación
Después de un par de altibajos para Ferrari, debidos a que el público argumentaba que sus autos se volvieron demasiado confortables y blandos en cuanto a velocidad compete; el 21 de julio de 1987 en la ciudad de Maranello, Italia, Ferrari presentó al F40 con motivo del su cuadragésimo aniversario.
Este modelo fue el último que contó con la supervisión personal de Enzo Ferrari —quien sabía que su final estaba cerca, por lo que quería dar un último regalo extraordinario al mundo—.
Un auto de carreras, destinado a las calles
El F40 cuenta con un motor V8 biturbo de 478 CV de potencia dispuesto en posición central-trasera, mientras que la transmisión corre a cargo de una caja de cambios manual de cinco velocidades unida a la parte trasera del motor.
Se convirtió en el coche de calle más rápido del mundo al momento de su producción, gracias a su aceleración de 0 a 100 kilómetros/hora en 4,1 segundos, para una velocidad máxima de 324 km/h; un hecho sin precedentes, puesto que los autos de esa época no sobrepasaban los 321 km/h.
Ligereza ante todo
El F40 cuenta con muy poco equipamiento para lograr 1,100 kilogramos de peso en vacío; inicialmente solo había ventanillas de plástico, típicas de las carreras, carecía de alfombrillas, equipo de sonido y tiradores convencionales en las puertas, un dato sorprendente es que hasta la cantidad de pintura aplicada a la carrocería se tuvo en cuenta para lograr el mínimo de peso posible, usando únicamente 2 kilogramos.
“Me da igual si los paneles de su carrocería están mal ajustados y tienen grandes huecos. Quiero que su conductor pise el acelerador a fondo y se cague en sus pantalones”-Enzo Ferrari.
Un gran modelo, desencadena una gran demanda
Esta curiosa frase del fundador de la marca proyecta la ferocidad que buscaban en el F40, cuyo desarrollo fue sorprendentemente rápido, puesto que tardó únicamente 13 meses en lograrse y pasó de un aproximado de entre 400 y 450 unidades, a una producción de 1,315 de 1987 hasta 1992, un hecho insólito, puesto que este tipo de automóviles tienden a tener un número limitado de unidades y suele ignorarse que el público demande más.
¿Los Ferrari siempre deben de ser rojos?
Oficialmente, se ha declarado que todos los Ferrari F40 eran de color Rosso Corsa; sin embargo se cree que aproximadamente 12 unidades fueron repintadas por la propia Pininfarina tras su producción; se estima que 3 unidades fueron pintadas de negro, mientras que 9 fueron pintados en color amarillo.
Deseado por todo el mundo
El F40, es uno de los modelos más codiciados desde su lanzamiento, por lo que varias celebridades han luchado por tener uno, como es el caso del cantante Eric Clapton —quien tiene una gran colección únicamente de Ferrari— así como Rod Stewart, siendo de los primeros en conseguirlo. David Gilmour y Nick Mason —poseedor de una de las colecciones de autos más completas—, miembros de la mítica banda Pink Floyd, también tuvieron uno.
Jay Kay, el cantante de Jamiroquai tuvo uno, mientras que Luciano Pavarotti, era amigo personal de Enzo Ferrari y tenía una imponente colección de vehículos de lujo en su finca a las afueras de Módena; como dato curioso, tras el fallecimiento de Pavarotti, su F40 fue adquirido por Sebastian Vettel, ahora ex piloto de la escudería Ferrari de Fórmula 1. Otras celebridades del deporte motor que han tenido un F40, son Nigel Mansell, Michael Schumacher, Jacques Laffite, Patrick Tambay, Alain Prost y Felipe Massa.
Sin lugar a dudas, el Ferrari F40 sigue siendo uno de los iconos del automovilismo, pues su rusticidad y potencia, continúan enamorando a las generaciones actuales.