Triunfa el Abierto Mexicano

El complejo Mextenis lució repleto desde los primeros días para ver al mallorquín, quien mostró un nivel cercano a su mejor tenis luego de ocho meses de inactividad producto de una lesión en la rodilla. “Quiero agradecer a todos lo que hacen posible un torneo al que lamentablemente no había podido venir en siete años y me hacía mucha ilusión regresar.Ha sido una de las semanas más bonitas que he tenido en mi carrera, llevo un tiempo complicado, siete meses difíciles, y volver a competir en Acapulco ha sido una experiencia inolvidable y ha sido gracias a todo este público que me ha apoyado. Me han hecho sentir otra vez como jugador competitivo”, dijo el mallorquín al terminar su encuentro con su compatriota David Ferrer, quien no pudo hacer el tetracampeonato que le hubiera dado el Guaje de plata.

 

En las damas fue la italiana Sara Errani quien se convirtió en la cuarta mujer que conquista en dos ocasiones la cita azteca. La mediterránea venció a la española Carla Suárez Navarro en dos mangas de 6-0 y 6-4 para alzarse de nuevo con la victoria. “Es un torneo muy bonito, con muy buenas instalaciones y muy buen nivel. Quien no viene es porque no ha venido antes, es uno de los mejores del mundo”, dijo en entrevista con Playboy la número 9 del ranking WTA.

 

Una asistencia récord para el evento y tres tenistas Top Ten combinado la ATP y la WTA por primera vez en su historia marcaron el cierre de la era de arcilla para la justa en el Puerto, que se prepara rumbo a un nuevo reto que involucra el cambio de superficie.

 

Traer a más jugadores del top 5 y convertirse en un Masters 1000, esa es la labor de Mextenis para el futuro, según aseguró el presidente del organismo, Raúl Zurutuza, y para ello, el primer paso: dejar la arcilla para cambiar a cancha dura.

 

“Estamos pensando en Martín del Potro, en Roger Federer o Novak Djokovic. Alejandro Burillo (presidente del Grupo Pegasso, dueño del torneo), quiere a los mejores del mundo y nosotros tenemos que darle resultados”, dijo Zurutuza, quien habló también de un posible cambio de sede para esta flamante etapa.

 

Quizá el principal problema de tener un torneo de cancha dura durante estas fechas en México sea que coincide con el torneo de tenis de Dubai, una justa de la misma clasificación que la mexicana, pero con una bolsa garantizada considerablemente mayor que atrae a tenistas mejores clasificados.

 

“Nosotros estamos muy contentos con la cancha de tierra batida, pero estoy seguro que los organizadores habrán pensado muy bien las cosas para un cambio tan importante”, comento a Playboy en este respecto el cuarto clasificado mundial y subcampeón este año, David Ferrer. Los tenistas españoles, que han dominado el Abierto varios años, se distinguen por ser especialistas en la arcilla. Ahora quizá lo piensen dos veces para defender su dominio en la cancha dura.

 

Además, ser el único Open 500 en arcilla en esta parte del calendario daba un plus al Abierto Mexicano para atraer a tenistas de buena categoría como el mismo David Ferrer, Nicolás Almagro, Flavia Pennetta, Sara Errani, entre otros. Ahora tendrá una competencia directa con Dubai, que tiene mejor alcance financiero.

 

“Hemos estado en la misma fecha que ellos por seis años y ya tuvimos aquí a dos top 5 del mundo, pero es cierto que Dubai será el enemigo a vencer”, añadió el presidente de Mextenis.