La tradición de uno de los eventos deportivos más esperados del año alcanza de nuevo los corazones de seguidores estacionales y fanáticos de hueso colorado. El SuperBowl xlviii entre los campeones de la Conferencia Nacional y la Conferencia Americana volverá a estar entre los eventos más vistos y publicitados del año, pues la señal del encuentro se extenderá a más de 200 países en todo el mundo, incluyendo a México.
El Super Bowl es el juego cumbre de una de las ligas de deporte profesional más poderosas del orbe, que presume cuatro representantes en el Top Ten de los equipos más valiosos del planeta (Dallas Cowboys, New England Patriots, Washington Redskins y New York Giants) según Forbes. Tan solo el año pasado, los consumidores del Súper Domingo dejaron una derrama de unos 11 mil millones de dólares y unos 24.1 millones de tuits enviados durante el partido. Ésta es una liga de paridades deportivas, poderío monetario y alta competencia, y su juego por el campeonato deparará con seguridad otro de sus desenlaces cardíacos, muy acordes con el estilo emocionante de las últimas campañas.
¿Cómo olvidar la historia que ha dejado en nosotros la lucha encarnizada por el trofeo Vince Lombardi, desde aquel primer campeonato de los Green Bay Packers en 1967? El Súper Tazón está lleno de leyendas y grandes sucesos. Los conocedores hablan de la dinastía de Chuck Noll y sus Steelers en los años 70, de los 49ers de los años 80 y de los Dallas Cowboys en los 90. Los fans traen a la memoria las actuaciones en el Súper Domingo de Joe Montana, la revancha triunfadora de John Elway, las recepciones de anotación de Jerry Rice o el alma defensiva dominante de Ray Lewis. Muchos admiraron la garra con que los New York Giants vencieron a los invictos New England Patriots en la edición xlii o han sufrido por el destino funesto de equipos como los Buffalo Bills y los Minnesota Vikings, cada uno con cuatro dolorosas derrotas en el Juego Grande.
Si este evento es la gran fiesta que congrega familias y amigos, es quizá porque todo lo que entra en su órbita parece situarse a la misma altura que el partido. Nuevamente, la presentación estelar de su legendario show de medio tiempo genera grandes expectativas. Si hemos vibrado con los shows de íconos musicales como Michael Jackson, Madonna o U2, en esta oportunidad la NFL apuesta por un fenómeno que le hará un guiño a Playboy: el elegido es el cantante Bruno Mars, quien apareció hace unos meses en la portada de la edición estadounidense del conejito junto a nuestra bellísima playmate, Raquel Pomplun.
Así que haz planes, confirma tu lista de invitados y prepárate para disfrutar de una fecha que te brinda el pretexto perfecto para caer en todos los placeres del buen comer y el buen beber. ¿Ya tienes listas las cervezas, las botanas y las alitas?
HAY MÚSICA
En esta oportunidad la NFL apuesta por un fenómeno que le hará un guiño a Playboy: el elegido es el cantante Bruno Mars, quien apareció hace unos meses en la portada de la edición estadou-nidense del conejito junto a nuestra bellísima playmate, Raquel Pomplun.
¿Sabías que…
Se calcula que durante el Super Bowl de la temporada 2012 entre los Baltimore Ravens y los San Francisco 49ers se consumieron mil 250 millones de alitas de pollo, 50 millones de cajas de cerveza y se vendieron 27 millones de porciones de pizza?