Ready Player One: Stadia y el amor por las consolas
Uno de los objetos de culto que solemos coleccionar los ñoños son aquellas viejas consolas con las que hemos crecido y nos han acompañado durante nuestra vida. Cómo olvidar los colores negro, rojo y gris del NES, la perfección de diseño del Game Boy y su constante adelgazamiento con el paso de los años, las sexys curvas del N64, el acabado de piano en la parte superior del PS3, al Wii con esa luz azul en la ranura de discos que combinaba elegantemente con cualquier mueble para televisión que tuviéramos, o el espantoso diseño de la Xbox original (aceptémoslo, Microsoft nunca ha tenido una consola digna de presumirse en cuanto a diseño). Recuerdo que en mi juventud tuve que decidir entre escoger el camino del N64 o probar aquella consola de la que todos hablaban: PlayStation. Una difícil decisión cuando tu presupuesto es limitado y sólo puedes tener acceso a uno de ellos. Esa elección determinaba a qué títulos tendrías acceso durante los próximos años e incluso si podrías intercambiar juegos con tus amigos o con el güey del mercado (saludos al Amo del Videojuego, mi dealer de confianza). A la distancia, esas consolas que tanta alegría nos trajeron, se quedan guardadas acumulando polvo en algún rincón del armario siendo sustituidas por la nueva generación que siempre propone un mayor poder de procesamiento como si eso significará mayor diversión, aunque la experiencia nos recuerda que eso no es precisamente cierto.
Sin embargo, a pesar de lo nostálgico que era coleccionar cosas, el formato físico tiende a desaparecer. El contenido se vuelve accesible en cualquier parte del mundo simplemente teniendo una conexión a internet y parece ser que estamos presenciando quizá la penúltima generación de consolas tal y como la conocemos.
Así es, Google presentó: Stadia. Una plataforma de videojuegos que te permite jugar, sin la necesidad de una consola, desde un celular, tablet, computadora o desde cualquier televisión. La sincronización total de tus avances, sin importar dónde comenzaste a jugar, gracias a los poderosos servidores de Google que tendrán siempre guardadas tus partidas y disponibles en todo momento para que las continúes a la hora y en el lugar que quieras. Si bien es cierto que la sincronización de juegos mediante la nube ya es una realidad, lo interesante de Google es la penetración que puede lograr gracias a su infraestructura y ver si son capaces de convencer a los desarrolladores de llevar sus licencias a su plataforma.
Sin duda, la idea de poder tener tus juegos en todo momento y en cualquier parte en la que te encuentres es muy atractiva, además de visualizar un futuro donde no te quedes fuera de jugar algún título simplemente porque tu consola no es compatible.
Tendremos que esperar algunos meses para que el mundo pueda ponerle las manos encima a este nuevo servicio y descubrir si Google es realmente un digno competidor o si los gigantes de la industria le siguen la corriente y empiezan a migrar sus licencias a alguna opción online que les permita una mayor penetración. Google está buscando dar el primer paso realmente relevante para olvidarnos de las consolas, pero sabemos que son expertos en sacar productos que a la larga dejan en el olvido y no pasan de ser un desilusionante recuerdo.
