Para que Beas desde Brasil: Tri de derrotas

Desde Belo Horizonte. ¿O te vale? Dicta aquella campaña de Televisa para generar una nueva conciencia como mexicanos. Misma empresa dueña de la selección mexicana y responsable en gran medida de esta cruda espantosa que da cada que nuestra inflada representación futbolística retoma el camino de la verdad. Pero, me niego a creer que lo vivido en esta Copa Confederaciones representa nuestro nivel. Dudo mucho que todo el trabajo y confianza se tire a la borda por un concepto en la cancha timorato y especulador. Vendrán días serios y que deben ser de mucha autocrítica y reflexión, se necesita un personaje más allá de la figura de un técnico, periodista, jugador, directivo que descifre el nuevo rompecabezas de la verde, uno que ponga las cosas en su lugar y entienda que de naciste ser valiente, no olvidar el ADN del mexicano y dar la cara para explicar semejante fracaso en este semestre. Se necesita gente que se baje del ladrillo y la actitud de siempre de sentirse los todo poderosos. Es momento de dejar a un lado los roles y unificar los esfuerzos para no perder lo que todo un país piensa: ¡una generación diferente y sin miedos! ¡Bienvenidos, bienvenidos! A los tiempos donde hay que ver quién tiene el valor y a quién le vale. 

 

 

El trajín por el gigante país brasileño promete vivir su segundo periodo lleno de emociones. Uno sin mexicanos. Uno que excite menos el alma patriota y genere compromiso al oficio. La tempestad es algo común en las coberturas, más cuando se viene de mexicano. Todo es una tragedia (vaya paradoja, ya que siempre inicia y termina en un burdel de chicas galantes). De un lado se le dice prensa carroñera, del otro comprometidos con la verdad; y uno en medio salvando al cliente, al amigo, a tu fuente, a tu medio y a tus ideas. Ahí sobrevivir a las manifestaciones (no por el peligro de ellas, sino para no quedarme de planta en una batalla que no es la mía), ha sido apasionante. Algo me queda claro, la colectividad me hace hervir la sangre, la justicia perder la razón y los movimientos buscar mi pasión. Vaya que Brasil me regresa esperanza en la juventud y en sus causas. Mucho que aprender de ellos que han aprovechado el escenario para creer en un mejor país y no sólo en un Mundial. Eso sí, para los organizadores del mega evento deportivo arranca su chamba a marchas forzadas, ya que es un hecho, ninguna sedes hasta ahora a las que he ido esta lista en todos los requerimientos para venir como turista o periodista.