Tomar fotos o video, meter comida o hacer apuestas, son algunas de las muchas cosas que no se podrán hacer en las sedes olímpicas
El Comité Olímpico Internacional y el Comité Organizador de Londrés 2012 han publicado una serie de normas en las que se aclara todo lo que no se puede hacer dentro de las instalaciones y sedes de los juegos.
Algunas de las reglas son muy obvias, otras totalmente absurdas, algunas necesarias por razones de seguridad y muchas más, restricciones que buscan proteger el gran negocio olímpico.
Entre lo más ridículo y absurdo es que los espectadores no podrán tomar fotos o grabar video salvo que se use para consumo personal, es decir, no se pueden publicar en internet ni en redes sociales —los organizadores están conscientes de que esta norma será imposible de aplicar—.
No se podrá entrar a los estadios e instalaciones con bebidas o alimentos a menos de que sean para un bebé. Esta medida se aplica para proteger a los comerciantes oficiales que, por ejemplo, venderán en hasta 90 pesos una cerveza dentro de las sedes.
No pueden meter frises, paraguas grandes, cornetas, tambores, matracas, banderas de países que no compitan, grandes cantidades de monedas o encendedores. Evidentemente tampoco se permitirán armas o drogas.
Dentro de las reglas más obvias están el no pelear dentro de los estadios, no embriagarse, fumar o cruzar apuestas —ésta última tal vez sea inevitable—. Tampoco se permiten manifestaciones políticas, religiosas o ideológicas en las tribunas, así como portar ropa o accesorios alusivos a cualquier movimiento de ésta índole.
Por último, una de las medidas más importantes para los organizadores será la de prohibir cualquier manifestación publicitaria encubierta por parte de alguna marca que no patrocina oficialmente el evento. El antecedente se dio en el Mundial de Sudáfrica cuando una treintena de holandesas uniformadas con minifalda realizaban una campaña promocional para una marca de cerveza.
A pesar de todas estas medidas, las entradas para los juegos llevan un excelente ritmo de venta y se espera que muchos de los escenarios estén abarrotados, aunque eso sí, quien asista debe estar consiente de que por el puro hecho de estar en las tribunas, si son grabados por las cámaras de televisión el Comité Organizador y el Comité Olímpico Internacional tienen derecho a usar y explotar esa imagen de por vida sin pagar regalías de ninguna clase.