El Caballo de Turín de Béla Tarr

Éste es El Caballo de Turín, el más reciente film del húngaro Béla Tarr y su última colaboración al cine como director, lo que lo vuelve un trabajo fascinante.
Por Víctor I. Torres
¿Ficción o predicción?
Inspirado en un episodio que marca el final de la carrera como filósofo de Friedrich Nietzsche, el 3 de enero de 1889 en la plaza Alberto de Turín, el susodicho se arrojó llorando al cuello de un caballo agotado y víctima por su cochero. A partir de este acontecimiento, que compone el prólogo de la película de Béla Tarr, el autor nos hunde en la locura y el mutismo. El caballo de Turín indaga en los destinos del cochero, su hija y el caballo, en una atmósfera de pobreza que anticipa el fin de la existencia y de los tiempos.
Con la proyección de esta película se inauguró una retrospectiva dedicada a la totalidad de la obra del director húngaro. En esta función especial en la Cineteca Nacional el realizador comentó al público que esta es su última película. Ante la sorpresa de los espectadores, Tarr añadió que no le gusta auto-imitarse y que comenzará una nueva faceta como productor argumentando que un buen productor es aquél que protege al director.
El filme está disponible tanto para la 53 Muestra Internacional de Cine, como en la retrospectiva de Tarr.
Un poco de lo que a usted, lector cinéfilo que gusta de los planos secuencia muy largos y de la profundidad de la escasez de diálogos, le espera en esta muestra.