2×1: Parejas en guerra
Por:
Jafet Gallardo
05 Jun 2018
Verano rosa Ginger es una chica inglesa que vive con sus padres, que podrían ser la envidia de cualquiera. Su […]
Verano rosa
Ginger es una chica inglesa que vive con sus padres, que podrían ser la envidia de cualquiera. Su mamá es pintora y su papá es un activista que jamás le regatea su libertad; ncluso pide que lo llame por su nombre para tener mayor cercanía. Ginger tiene una amiga de su misma edad que le ayuda a llegar a donde ella no se atreve. Ambas pasan mucho tiempo juntas descubriendo ese nuevo mundo que se abre luego de la Segunda Guerra Mundial donde el movimiento de las libertades civiles comenzaba.
Sally Potter, la misma directora de Una Lección de tango regresa a las pantallas con una historia de amistad y crecimiento en un Londres marcado por la crisis de los misiles en Cuba y el descubrimiento de la madurez en una solitaria e idealista chica. Potter de inmediato, sin muchos preámbulos y sin diálogos explicativos, nos adentra en una intricada relación de amistad a la que suelen llegar muchas mujeres jóvenes.
Potter hace uso de una fotografía en la que deja entrar la luz a chorros para lograr contrastes anímicos en los personajes. Sabe hacer uso de las facultades de sus protagonistas para lograr actuaciones convincentes que llegan a conmover al espectador al grado de no perder detalle en lo que sabremos acabará de una manera trágica. Todo esto aderezado por un soundtrack salpicado del mejor jazz.
Ginger y Rosa es una historia de amistad pero también es una crítica desde dentro al activismo social y los entretelones de lo que sucede en las buenas consciencias de izquierda. El mundo está a punto de explotar debido a las disputas entre EUA y la URSS pero también el pequeño mundo familiar de Ginger. Imperdible.
Declaro la guerra…
Con una buena aceptación en Cannes y una aceptación similar en el Tour de cine francés era de esperarse que Declaración de Guerra pronto tuviera corrida comercial. La cinta dirigida, escrita y actuada por Valérie Donzelli es todo lo que uno puede esperar de un drama francés: una acuciosa revisión del ser humano ante la adversidad, un relato intenso sobre algo cotidiano que toma visos de volverse trascendental y un final realista, es decir alejado del happy ending.
Declaración de guerra es una revisión autobiográfica de la directora Donzelli al drama que conlleva tener un hijo con una enfermedad mortal, como lo es el cáncer. Romero y Juliette son dos jóvenes que se conocen en una fiesta y acaban viviendo un tórrido romance que desemboca en matrimonio. Todo parece sonreírles, son bellos, tiene buenos trabajos, sus familias se llevan bien y el futuro parece ser prometedor. Cuando por fin se embarazan descubren que su hijo tiene problemas severos en la cabeza y que deberán sacrificar todo, incluso su relación, su vida y dinero en salvar a su hijo.
Lo dijo él primero
Este lunes murió a los 87 años uno de los escritores norteamericanos más prólíficos de influyentes del siglo XX, Richard Mathenson. Leugo de publicar su cuento Nacido de hombre y de mujer en una antología del género su carrera siguió por el guionismo y la escritura de novelas de terror/ciencia ficción.
Su novela Soy leyenda fue adaptada al cine cuando menos tres veces con resultados regulares, la más reciente cambiando a los personajes y ofreciendo un final feliz muy distinto al original.
Su paso por La dimensión desconocida nos ofreció varios de los mejores capítulos que las temporadas originales de la serie. Gente como George A. Romero, Stephen King, Anne Rice e infinidad de narradores y cineastas aceptan su influencia. Descanse en paz Richard Mathenson.
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