Avenida La Tizona: El sabor de los Mochis con un toque sofisticado

Un martes cualquiera, caminando por las calles de la Condesa, me topé con una esquina que huele a mar, pero suena a rock. No hay banda en vivo, ni mesas atestadas de botana frita.
No hay cubetas ni meseros gritando nombres de tragos inventados. Pero sí hay algo más importante: sabor.
Se llama Avenida La Tizona, y como buena historia del norte, empezó en una calle de Los Mochis, en Semana Santa, con sol, amigos, y mariscos frescos en el plato. Ahora vive aquí, en CDMX, pero con una vibra distinta.
Desde que entras, el lugar se siente íntimo. Cálido. Sin pretensiones. La carta no grita, seduce.
Iniciamos la visita con un Sashimi de Atún —delgado, intenso, con salsas negras que hacen salivar y rodajas de chile serrano que prenden la boca. Estábamos listos para lo que viniera.
Y llegó el Ceviche Mitotero: pescado, camarón, pulpo, todo nadando en clamato, cebolla morada, pepino.
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Una bomba refrescante para el alma cruda y el estómago feliz.
Luego, un giro inesperado: Fettuccini Alfredo con camarones. No uno o dos: demasiados.
Tantos que no peleamos por el último camarón de la pasta. Un plato que no tiene miedo de ser generoso.
Pero lo mejor estaba por enrollarse en una tortilla: el taco Courtney Jones, con un medallón de atún con chimichurri de cilantro, col morada caramelizada y queso de cabra. Rock puro.
Y después, el taco de pastor, sí, pero con camarón, queso Chihuahua y piña con canela. Tan arriesgado como adictivo.
Los tragos: desde un Mojito Sinaloa hasta un carajillo servido con amor y que no olvidemos que los viernes están al 2×1 y para nada le piden algo a los tragos carísimos de autor. Son básicos con amor.
Y el mantel, esa joya de papel que rinde tributo al equipo completo —desde cocina hasta barra— como si cada uno fuera parte de la banda.
Avenida La Tizona no es solo una marisquería, es un reencuentro con la tierra que te vio nacer, aunque nunca hayas pisado Sinaloa.
Es sabor del norte, sin el estruendo. Es rock, no banda. Y sí, es ese lugar al que vas con amigos, pero vuelves con más ganas de quedarte.
¿Dónde?
Salamanca 69, Roma Nte., Cuauhtémoc, 06700 Ciudad de México.
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