Ricardo Zárate y su libro “El chico sin nombre”
En nuestra recomendación mensual tenemos en entrevista a Ricardo Zárate, autor del libro El chico sin nombre de la editorial Alfaguara. Descubre de qué va este libro que no puede faltar en tu biblioteca personal.
La historia: Alex y la búsqueda de Dante
Uno de los temas de la novela es la identidad en un tiempo de explosión tecnológica. Alex, un chico de 17 años, es un genio informático natural. Él tiene un hermano mayor, Dante, que desapareció años atrás. A pesar del poder político de sus papás, no han encontrado a su hermano. Alex reflexiona sobre esas cosas en el mundo para las que no hay palabras. Como sucede cuando un hermano pierde a un hermano. Él, en su momento de crisis, se pregunta quién es a partir de ese suceso. Así, emprende la búsqueda de Dante, porque de alguna manera, buscar a su hermano es hallarse a sí mismo. Y Alex comienza colapsando el sitio web del Sistema de Seguridad Nacional.
Ricardo Zárate nació en León, Guanajuato, en 1982, y dejó su prometedor futuro como ingeniero para dedicarse a la literatura.
El motor de arranque del libro
Elegí la justicia familiar, el secuestro y la desaparición forzada porque son problemas actuales muy fuertes. Entendí que ese vínculo de intimidad podía ser muy honesto de cara a esa herida en el país. De manera narrativa, intenté conciliar este tema social con la revolución tecnológica.
Una “oscura” novela juvenil
La novela retrata un país de inseguridad, violencia y hasta cultos demoníacos. Yo creo que la calidad del conflicto determina la calidad de la historia; un conflicto interesante potencia a los personajes. No quise ofrecer algo fantasioso o artificial al lector joven, sino una trama con asideros en una realidad identificable. Y que esa realidad fuera confrontada por un chavo.
Literatura vs narrativas virtuales
Vivimos un tiempo de mucha información y poca verdad. La verdad está vinculada a la honestidad. La ficción se presenta como tal, es muy noble; pero las ideologías son las peligrosas, al presentarse como si fueran verdades. Por eso leer ficción es muy importante: es un ejercicio de empatía. Nuestras relaciones tecnológicas son superficiales, nos dan percepciones y no realidades.
El bien y el mal
Alex está enfrentado con estas dos nociones por la desaparición de Dante. He estado meditando si el bien y el mal son antagónicos, opuestos; o si de alguna forma perversa, el mal trabaja para el bien. A veces un evento trágico es la única forma de despertar una conciencia.
