Cada día amamos más y más a Kaiser Chiefs
Fue en el año 2006 cuando escuché por primera vez los acordes de “Everyday I Love You Less And Less”, cuando comencé a querer más y más a Kaiser Chiefs. 
La banda británica extraída de una oleada de buen rock de mediados de los 2000 como: Kings Of Leon, Kasabian, Razorlight, The Rapture, entre otras que tenían un sello bien marcado, ninguna sonaba igual entre sí.
Ayer, 13 años después, tuve la oportunidad de ver a los intérpretes de “Ruby”, primer sencillo de su material Yours Truly, Angry Mob, que contaba con un video en donde podíamos ver a los británicos en una versión gigante con una actitud muy a The Beatles con acordes más pop que rock, sin embargo, anoche demostraron lo contrario.
Vinieron con el pretexto de promocionar Duck, su último material estrenado en el verano y aunque sus boletos no se acabaron en segundos, ni estaba lleno hasta no poder moverte como en la presentación de LP que yacía a unas calles, la banda sabe de qué está hecha.
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Estoy segura de que hace poco más de 10 años hubieran hecho un par de sold outs, aunque claro, siempre y cuando no hubiesen tocado al mismo tiempo que Vampire Weekend, Cage The Elephant, Spoon o Peter Hook, metiéndonos en apuros a los amantes de la música.
Al Plaza Condesa solo llegaron fans y no es que me ponga “exquisita” con los asistentes a los conciertos, lo que si es que en esos conciertos tan íntimos es difícil pasar de largo sin contagiarte de la energía que solo seguidores fieles pueden transmitir.
“People Know How To Love One Another”, segundo sencillo de Duck, fue la elegida para comenzar la fiesta y cuando menos lo esperaban “Everything Is Average Nowadays” siguió con la misma euforia.
Ricky Wilson no dejaba de correr de un lado a otro, subió a la batería y a las bocinas una y otra vez recordándome a Pelle Almqvist de The Hives, sin duda son músicos que si es que no la están pasando bien, nos hacen creer siempre lo contrario en cada uno de sus shows.
Evitaron tocar una de mis canciones favoritas “Love Is Not a Competition” y no los juzgo, pues la noche fue golpe tras golpe de euforia musical y una canción de ese grado era un riesgo para la banda.
“Target Market”, “I Predict A Riot”, “Golden Oldies” y “Ruby” fueron algunas de las más coreadas de la noche y justo cuando creímos que habían quemado sus hits y no habría nada mejor para el cierre, “The Angry Mob” fue la cereza del pastel que nos dejó con un sabor dulce camino a casa.
