Hotel Mumbai: El atentado La escalofriante crónica de una muerte no anunciada
Por C. Daniel Martínez / elblogmaraz.blogspot.com
26 de noviembre del 2008. Los agobiantes gritos provenientes de los ciudadanos de Mumbai (India) retumban sobre las ventanas del hotel Taj Mahal Palace. “Déjenlos pasar”, dice el gerente del hotel. El grupo de seguridad abre las puertas, permitiendo la entrada al grupo desesperado; entre ellos, a cuatro terroristas en cubierto que, comandados por “El Toro”, disponen a cumplir una misión yihadista en diversos puntos de la ciudad, incluyendo el propio hotel.
Esta escalofriante —pero real— escena es la que da inicio al conflicto de Hotel Mumbai (Hotel Mumbai: El atentado), opera prima del director australiano Anthony Maras cuyo elenco se encuentra conformado por Dev Patel (Slumdog Millionaire, 2008; Lion, 2016), Armie Hammer (The Social Network, 2019; Call me by your name, 2017), Nazanin Boniadi (How I Met Your Mother, 2011-2014), entre otros más.
La enseñanza de Hitchcock
Inspirado en el documental Surviving Mumbai (Midwinter, 2009), narra los sucesos verídicos de los ataques terroristas en la misma ciudad de la India en la que, con un saldo de 173 muertes y más de 300 personas heridas, desató el pánico y el terror absoluto entre los pobladores.
Alfred Hitchcock decía que la diferencia entre el terror y el suspenso radica en el nivel de conocimiento que tenga el espectador: entre más conozca este y menos conozcan los personajes, más tensión se crea. Maras entendió esta premisa del maestro del suspenso, creando una experiencia completamente claustrofóbica y agobiante: el espectador no encontrará momento alguno en que pueda respirar, su desasosiego no cesará hasta que vea los créditos finales.
Lo peor del ser humano
El director presenta una perspectiva cruda y amarga de la humanidad: saca a relucir lo peor del ser humano en momentos de desesperación y de sesgos extremistas, por lo que se trata de una película bastante densa. La historia es bastante ágil, pero su contenido es perturbador y desalentador para quien lo vea. Su ejecución es efectiva, pero a costa de la irremediable angustia que vive el espectador.
La cinta muestra diferentes historias cuyo punto de convergencia es una misma locación: el hotel. No se trata de una película coral; sin embargo, presenta claros rasgos de dicha estructura, creando una polaridad de puntos de vista en torno a la catástrofe, lo cual favorece al desarrollo de la trama pues va más allá del punto de vista occidental: muestra el acto heroico de los indios por salvar a la mayor cantidad de hospedados en el hotel, aún cuando sus propias vidas corren riesgo.
Hotel Mumbai es una serie de caminos paralelos que en ocasiones se entrecruzan, creando una fuerte interacción entre personajes aparentemente opuestos: desde una familia millonaria y un empresario ruso con un oscuro pasado, hasta un mesero del hotel cuya lealtad a su religión se verá constantemente en riesgo por el bien de los huéspedes, a quienes también les es fiel.
Mucho más que una historia real
Además, para fortalecer la importancia de la cinta, Maras no se queda con el intertítulo cliché de “basado en una historia real”, sino que de forma paralela a la historia ficticia, muestra material de archivo auténtico filmado durante las primeras horas después del ataque al Taj Mahal Palace. Dicho recurso, al igual que lo utiliza Adam McKay en The Big Short (2015) y Vice (2018), crea una aproximación del espectador con la realidad. Sí, la historia mostrada es ficticia, pero quien ve la película no debe de olvidar que fue un suceso real, y ahí estará Maras para recordarlo de forma constante.
Sin embargo, estos caminos convergentes no son perfección pura; de hecho, algunos son veredas infinitas, cuya culminación nunca es vista: son recorridos repletos de baches que dura y penas se llegan a cruzar con la historia central, pero después se pierden en la deriva. En un diferente corte del filme, podrían taparse dichos caminos y de verdad que no alterarían en ningún sentido el curso de la narrativa.
El filme es una propuesta que trasciende los estándares del conjunto de cintas que hablan sobre los atentados terroristas, por lo que podría tratarse de un posible prospecto para la categoría de Mejor Película Extranjera en los Premios de la Academia. Es muy pronto para afirmar que será una nominada, pero sí es probable que figure en las primeras listas preliminares en la carrera por el Óscar.
Estreno: 21 de junio
