El sensual coronavirus y nuestra oportunidad de revivir la llama
Por la pintora Luciana Cacciaguerra Reni
¿Y que hacemos ahora? En estos tiempos de tempestad pandémica, la sexualidad se ha visto atacada por varios frentes. Estamos en pareja pero nos da miedo el contacto sexual porque no sabemos hasta qué punto sea peligroso; estamos en pareja pero a distancia y no sabemos cómo transcurrir tanto tiempo sin reunirnos con el otro bajo las sábanas. Estamos solos y ahora solo podemos satisfacernos con sustitutos mecánicos, manuales o electrónicos y por último estamos en pareja, no nos soportamos pero encerrados en cuarentena hasta nuevo aviso, la urgencia y la tentación se asoman ¿Se me ha olvidado alguno?
Sin duda alguna en tiempos de aislamiento no se nos hace nada fácil este tema. Para empezar nos invade la preocupación que se puede transformar en fobia y obsesión que a su vez nos lleva al rechazo inconsciente a tener sexo y al como hacerlo. Sabemos que el Coronavirus se contagia a través de la saliva aunque aun no se ha comprobado que se propague por transmisión sexual, pero entonces ¿cómo dejarnos llevar por un beso apasionado, deseoso de ser el prefacio de un sexo maravilloso? El bloqueo es automático.
El mismo hecho de la limpieza ya puede ser obsesivo normalmente imaginémonos en estos momentos en los que se nos predica lavarnos las manos mil veces al día y con desinfectante de todo tipo. ¿Echaremos lo mismo a la boca y partes íntimas de nuestra pareja? Así no vale tener ninguna sesión erótica además de ver llegar una demanda judicial.
Los besos no se dan solo en la boca, se puede recorrer el cuerpo entero a besos y lengüetazos, por lo cual peor se pone el panorama. Incluso todos los juguetes eróticos que se quieran o puedan utilizar también están bajo juicio, porque hay que tratarlos igualmente como posibles objetos de contagio, por lo que hay que lavarlos y relavarlos con jabón por lo menos veinte minutos, así que se nos puede apagar la fogosidad del momento. Con este miedo es muy difícil alejar la preocupación y enfocarse plenamente en un intercambio sexual que debe ser relajado y completamente ajeno a cualquier estrés por paranoia.
Pero después de todo, no todo está perdido porque para las relaciones a distancia la tecnología nos puede ayudar y ¡mucho! Seguramente nadie es ajeno al uso de una pantalla para tener sesiones eróticas con su pareja a distancia, o simplemente los online triple X y las páginas web de sexo, el llamado sexting, así que ya por este medio se puede remediar de algún modo a la momentánea abstinencia.
Claro, no es lo mismo que sentir la piel de la pareja rozando la tuya, no es igual oler su aroma o perfume, tampoco es tan bonito como tocarse y abrazarse, besarse y susurrarse palabras motivadoras o simplemente oír los gemidos del otro que son indudablemente otro factor de excitación. No hay nada como el person to person en una sesión de sexo; aquí funcionan todos los sentidos y cada segundo y cada movimiento que se intercambian, son parte de esa satisfacción momentánea que hace que el todo sea fantástico y liberador. Pero es lo que hay ahora en esta etapa tan controversial que estamos viviendo.
Si lo tomamos como una experiencia diferente con la que podemos satisfacer toda nuestra curiosidad, entonces no la veremos ya de forma negativa; si nunca hemos probado a tener sexo por pantalla con nuestra pareja, pues este es precisamente el momento de hacerlo. La vergüenza y la timidez dejémoslas a un lado que no sirven para resolver el problema y lancémonos en esta aventura a la que tenemos derecho con nuestro amor, amante o amigo especial.
Como todo al principio y la primera vez no serán fáciles, dependiendo de la personalidad de los actores, pero pueden ayudarse comenzando a charlar tomándose una copa de vino, relajándose a medida que se adentran en la conversación que poco a poco dirigirán hacia la nueva experiencia sexual.
Por pantalla sabemos que será una masturbación de la que el otro será un espectador; hará lo mismo contemporáneamente o dirigirá la escena de esta insólita película para que los dos lleguen a la máxima satisfacción. No suena tan mal y por otro lado este escenario mundial nos da el permiso de explorar este terreno sin sentimientos de culpa o hacernos sentir particularmente sucios por intentarlo ya que no hay otra manera.
Ahora para las parejas que están transcurriendo juntos la cuarentena las cosas pueden ser aun más creativas porque pueden tomarse muchas más libertades compartiendo el mismo espacio. Ciertamente no están prohibidos los abrazos porque en estas circunstancias tienden a acentuarse los sentimientos de ansiedad, depresión y abandono y por lo que el aspecto emocional así que es suficiente con seguir atentamente las reglas higiénicas básicas, como el lavado de las manos y el integral antes de un acercamiento.
Se puede jugar a muchas cosas para volver el sexo mas interesante y apetecible. ¿Han usado disfraces alguna vez?, ¿han inventado historias que surgen de su imaginación sin límites?, ¿han querido realizar algún deseo sexual?. ¡Ahora es cuando! , háganlo sin temor a parecer ridículos ante el otro y simplemente déjense llevar por sus fantasías eróticas, esas escondidas que nunca han tenido el valor de expresar o pedir. Preparen cenas propiciadoras con comida tentadora, no hace falta armar una cena de 10 platos, con uno pero bueno basta, sin olvidarse del vino y la música.
Si aún no se confían, puede ser tranquilizador informarse con organismos de salud que pueden aconsejar la mejor manera de estar a salvo aún teniendo relaciones íntimas. El HSE Sexual Wellbeing, el servicio de Salud Sexual de la República de Irlanda, ha publicado una guía de actuación ante la pandemia del COVID-19 en la que explica ampliamente como comportarse en este caso.
Pero no renuncien a disfrutar de este experimento durante el encierro forzado, aprovéchenlo ahora porque después cuando todo pase y nuestras vidas regresen a la normalidad de siempre, el aburrimiento, cansancio diario y otras tentaciones externas harán que la routine regrese y sea de nuevo la única propietaria de nuestras vidas.
Ojalá que este viaje de exploración en el terreno amoroso y sexual pueda dejar huellas permanentes en nuestro imaginario y se vuelva la nueva costumbre que alimente una de las partes más importantes de nuestras relaciones, el sexo con amor o con simpatía. LCR
