El lujo del deporte: cuando se legitima la violencia

Pasó de villano a héroe en un año cinco meses. En el coliseo de las redes sociales, el condenado a muerte se enfrentó a la fiera de miles de cabezas, pero salió avante y en hombros.
El 23 de agosto de 2021, Renato Ibarra acaparó las portadas del 90 por ciento de los periódicos especializados en deportes y en las secciones temáticas de los de información general. El ecuatoriano anotó el 2-0 final del América sobre Xolos en el Estadio Azteca, de la J6 del torneo A2021.
Acusado por su propia pareja embarazada de intento de feminicidio y de aborto, fue más tarde absuelto al retirar ella los cargos, pero siguió un proceso en libertad por violencia familiar.
El club propiedad de Televisa lo apartó de sus filas “por vulnerar principios institucionales”. Sin embargo, al final lo ‘repatrió’ porque se lesionó un compañero.
En un nuevo boletín lleno de excusas para convencer a la opinión pública, el Club América manifestó que admitía a un tipo regenerado gracias a que lo puso a estudiar cursos que lo concientizaron de sus errores.
Tras meter “un golazo” en su retorno, la ovación fue estruendosa en el estadio y saltó a los impresos del día siguiente.
EL CIRCO DE LAS TAPAS
El diario deportivo Récord, que comenzó a editarse en 2002, publicó “Renació Ibarra”; el Esto, que cumple 80 años el 2 de septiembre, puso al jugador en un brinco; “¡Así, sí!”.
El Pásala puso el festejo de Renato y encabezó ‘Violento Zurdazo’.
Los periódicos calificados como serios no se hicieron a un lado: La sección Cancha, del periódico Reforma simplemente encabezó con altas: “GOLPE DE AUTORIDAD”.
La sección deportiva de El Universal tituló “De presunto agresor a Goleador” con la imagen de Renato cuando corría con los ojos desorbitados mientras apretaba los puños.
MAL CHISTE
Para José Luis Rojas Torrijos, catedrático de la Universidad de Sevilla y experto en temas de lingüística, estilo y cultura de género en el deporte, sostiene que lo más peligroso de todo es trivializar la violencia en espacios editoriales tan populares.
“El discurso es peligroso. El periodismo deportivo debe fomentar los valores positivos y no lo contrario, lo destructivo, la violencia y encima contra las mujeres.”
“El titular ‘Violento zurdazo’ es, aparte de simplón, de mal gusto, y el de ‘Golpe de autoridad’ también, como legitimar y normalizar que se puedan dar estos casos. Independientemente de que este hombre sea inocente o culpable –que eso lo diga la justicia–.
“Es lamentable que la violencia contra las mujeres se trivialice como si fuera algo más, sin diferenciar lo que es serio o lo que es grave de lo que no lo es”.
Para el el autor del reconocido blog periodismo deportivo de calidad todo tiene que ver con una línea de pensamiento ancestral en muchas sociedades.
“Es machismo en la prensa. La estructura de pensamiento que hay detrás es lo grave”.
TIEMPO EXTRA
En el fondo de la cancha permanece la visión androcéntrica de lo que debe ser el futbol o el deporte general y el periodismo deportivo. La apertura de esferas a la participación femenina no acaba de aceptarse en este coto percibido aún como hecho por hombres y para hombres, sostiene el sevillano.
“El tratamiento editorial dista mucho de lo que debería ser un discurso igualitario, respetuoso, no discriminatorio.
“Es un mal extendido no sólo de México, sino de muchas otras regiones del mundo”, expresa el coordinador del libro “Cómo hacer Periodismo Deportivo. Una visión Iberoamericana”, con la participación de periodistas y académicos de ocho países –y en el cual este columnista tuvo la oportunidad de contribuir–.
EL VIENTO SIEMPRE VUELVE
Estimado fan, esta columna no toca la incongruencia de una entidad deportiva como el Club América por su cambio de discurso de valores ni si Renato merece o no una segunda oportunidad (al cierre de esta columna se lesionó en el muslo izquierdo y fue intervenido quirúrgicamente, lo que le hizo perder el resto del torneo), sino de la forma en que algunos editores de deportes decidieron manipular la situación.
Quien esto escribe celebra regresar con el Lujo del Deporte, cuya limpieza en los negocios y en la vida siempre será un privilegio.
