Los resultados de un estudio realizado por más de 30 años, confirmaron que fumar persistentemente marihuana deteriora el cerebro y disminuye el coeficiente intelectual de quienes la consumen.
Investigadores de la Universidad de Duke, en Carolina del Norte, Estados Unidos, siguieron durante más de 30 años a un grupo de 1000 neozelandeses desde la década de los 70.
Los científicos estudiaron y trabajaron con el grupo de niños a los que siguieron durante su adolescencia y hasta la edad adulta, descubriendo que quienes habían fumado marihuana desde los 17 o 18 años de edad o antes (cuando el cerebro continúa en desarrollo), habían visto disminuida su capacidad.
Los especialistas consideraron otros factores como el uso de drogas como tabaco y alcohol, sin embargo, establecieron que el mayor daño había sido causado por el estupefaciente.
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El estudio fue publicado en las Actas de la Academia Nacional de Ciencias y requirió un esfuerzo extraordinario por parte de los científicos y los participantes. Entre las conclusiones más importantes que se tuvieron fue que la cannabis causa un daño irreparable en el cerebro, especialmente si se comienza a consumir antes de los 18 años.