Imaginemos un escenario: tú a diferencia de casi toda la población (según datos de Netflix México es el país que más ve series en maratones), no sabes ni qué es un serie.
Déjame echarte una mano. Según diversas plataformas de voto en línea como Metacritic, Rotten Tomatos, IMDB y claro, los Trend Topics de Twitter podemos ver saber cuáles han sido las series más vistas de la década, y que muchas veces coincide con las mejores, según los críticos.
Twin Peaks: The Return
Fue de las más mencionadas y vistas. Escrita y dirigida por David Lynch, cuenta la historia de Dale Cooper, un agente especial del FBI, que busca atrapar al asesino de Laura Palmer en el ficticio pueblo de Twin Peaks. Creada por Lynch y Mark Frost, fue la primera serie que seguía un arco largo a través de diversos capítulos y rompía lo autoconclusivo que había sido norma.
BoJack Horseman
Es la serie que le gusta a todos esos adolescentes de más de 30 años. Se trata de un caballo que vive el infierno de haber sido una estrella de finales de los 80 y principios de los 90 y que ahora nadie le haga caso. Adicto a diversas drogas, al alcohol y al sexo, está emparentada mucho con la estética de Robert Crumb.
Stranger Things
Es toda una oda la nostalgia. Trata de un grupo de niños en los años ochenta que encuentran a una niña con poderes mentales que es perseguida por una oscura agencia gubernamental. La serie es una especie de trivia por nuestros recuerdos. Va en su tercera temporada y aunque va cuesta abajo ha creado un fandom muy fiel.
The Americans
También está ubicada en los años 80, en plan Guerra Fría, pero acá no hay monstruos, solo humanos monstruosos. Está basada en una pareja de auténtica de espías rusos que estuvo infiltrada durante años, hasta su captura en los años 2001. Para algunos podrá parecer que no avanza tan rápido como otras, pero el suspenso y la calidad de las actuaciones la hacen imperdible.
Better Call Saul
Es una derivación o spin off, dicen los que saben, de Breaking Bad. Sin duda, el personaje más carismático de dicha historia era Saul Goodman un cínico abogado que hace lo posible para sobrevivir y sacar algo de dinero. Bob Odenkirk el actor que lo interpreta se echa al hombro toda la situación y nos brinda una historia humana de como James Morgan McGill se transformó en Saul Goodman.
Game of Thrones
Es la serie de la que sabes aunque ni siquiera hayas visto el empiezo. La serie que pasó de ser una apuesta como tantas otras de HBO a volverse el caballo de batalla, incluso a tener capítulos que costaban entre 8 y 11 millones de dólares. La búsqueda por ocupar el Trono de hierro llevo a volverla todo un evento popular, ya sea para reunir amigos en la sala de alguien a pagar el boleto de una sal de cine y verlo en pantalla grande.
Fleabag
Es como lo contrario a la anterior. No tiene grandes decorados o decenas de actores. Es más intimista, habla directamente al espectador, a veces literalmente, y desentraña la vida de una chica que vive su existencia en la capital de la Gran Bretaña. Grandes diálogos, un humor agridulce y la certeza que muchas situaciones le pueden suceder a cualquiera.
The mandalorian
Es la gran apuesta de Disney para su plataforma. Creada por Jon Favreau, el niño genio del estudio, toma lo mejor de la saga original, es decir todas las claves de un Western, además de los personajes que se quedaron en segundo plano, para crear una historia que convencido lo mismo a los fans más recalcitrantes que a los espectadores no familiarizados con la franquicia.