Tan solo durante 2020, la actriz Ximena Romo, estrenó cinco proyectos diferentes, entre ellos Dime cuándo tú. Sabe tocar el sax y le encantaría hacer un papel de espía en el futuro.
01. ¿En qué momento supiste que querías ser actriz?
Nací siendo actriz. Empecé en los escenarios desde los 6 años, pero como bailarina. Después, mis papás se dieron cuenta que tenía un rollo emocional y dramático, así que me inscribieron a clases de teatro musical. En ese entonces yo obviamente no lo pensaba como un trabajo; era un lugar donde me sentía cómoda y libre, hasta que Gerardo Naranjo me dio el papel de Lucía en Voy a explotar y ahora ya son 14 años de carrera.
02. ¿Qué es lo que buscas en un personaje?
En estos últimos tres años, estuve en una búsqueda muy física de personajes que eran completamente diferentes a mí y ahora empiezo a buscar cosas más emocionales; sobre todo personajes femeninos que se salgan de lo que estamos acostumbrados a ver.
03. ¿Algún personaje ha marcado un antes y un después en tu carrera?
Definitivamente, Rita Romero en Esto no es Berlín, porque Hari Sama nos regaló una historia de lo que significa la voz creativa en un momento en que yo atravesaba por una crisis. Justo después vino La diosa del asfalto, otra película que me sacudió por completo porque me enfrentó con muchos miedos.
04. ¿Existe alguno del que te arrepientas?
No, porque siempre he creído que a veces hay que atravesar ciertas paradas en el camino para llegar a donde quieres y es importante darles lugar y su pe- so. Incluso en casos que no han funcionado como pensé que lo iban a hacer, como en Como si fuera la primera vez. Al final he aprendido que cada proyecto me acerca más a lo que quiero hacer y esa cinta, por ejemplo, me viró precisamente en la dirección de Esto no es Berlín.
05. ¿Qué representan para ti las premiaciones?
Son importantes en el sentido de que, como industria, nos reúnen y ponen a reflexionar sobre lo que estamos haciendo, las formas de trabajo y lo que queremos en el futuro. En ese sentido, mi nominación (al Ariel) fue un reconocimiento a mi voz artística, a mi pasión y convicción por la actuación. Pero, al mismo tiempo, creo que lo que hacemos es subjetivo; no hay forma de calificar qué trabajo es mejor que otro, porque ninguna ficción es recibida de la misma manera por todo el mundo.
06. ¿Lo comercial está peleado con la calidad?
No, para nada. Al final del día siempre debes tener el mismo rigor y disciplina en cada trabajo, sin importar de qué tipo de proyecto se trate.
07. Este año estrenaste cinco proyectos cinematográficos y uno televisivo, todos de géneros muy distintos.
Tiene que ver con la parte experimental y con la búsqueda de cosas diferentes, pero lo he pensando últimamente y creo que también tiene que ver con mi educación, porque yo crecí con la idea de que la diversidad es importante y la vida está plagada de diferentes perspectivas.
08. Cuéntame de tu participación en Dime cuándo tú.
Yo era parte de este proyecto desde hace años, pero cuando comenzó oficialmente la preparación ya estaba en otro punto de mi carrera y el personaje era uno cuyo peor miedo era que la dejaran en el altar, algo que no me terminaba de convencer. Fui honesta, se lo comenté al director, Gerardo Gatica, y juntos decidimos llevar a Danielle por otro camino que de hecho cambió también un poco el rumbo de la cinta. Además, fue un proceso muy bonito porque esa libertad creativa se mantuvo en el set a través de la improvisación, lo cual le da un toque más orgánico a la comedia de la cinta.
09. ¿Hay algo de “Dani” en ti?
Este papel se asemeja mucho a quien soy. Es actriz, le apasiona lo que hace más allá de lo que pueda significar en esta idea que tenemos del éxito y sigue sus propias reglas, va a su propio ritmo. Lejos de buscar encajar, está buscando ser genuina con ella misma y fiel a sus decisiones, algo con lo que me relaciono también.
10. En la cinta, vemos una lista de experiencias obligadas en la CDMX. ¿Cuáles estarían en la tuya?
¡Son muchas! —risas— La casa de Frida Kahlo es un lugar hermoso y estando en Coyoacán, que en sí mismo es muy emblemático, me parece una visita obligada. La Biblioteca Vasconcelos que es una maravilla arquitectónica, “Las islas” y la Biblio- teca Central también son de mis lugares favoritos y agregaría Xochimilco.
11. A propósito de la premisa en Dime cuándo tú, si emprendieras un viaje para redescubrirte ¿por dónde empezarías?
Justo la pandemia me dejó con las ganas de un viaje al “Fin del mundo”, en Argentina, el lugar más al sur de América ubicado en la Patagonia. Empezaría por ahí y sería maravilloso llegar hasta la Antártida.
12. Si tu vida fuera un álbum, ¿qué canción describiría esta etapa?
“Sabré olvidar”, de Silvana Estrada.
13. Estarás en la secuela de Sexo, pudor y lágrimas.
Es una responsabilidad enorme y un reto muy padre, porque nos permite aprovechar esas historias nacionales que tuvieron mucha resonancia en su momento. La propuesta trae ideas que me agradan mucho y van de la mano con la película original, pero en un contexto en que la sexualidad es mucho más abierta y diversa.
14. Entre el cine, la televisión, el teatro y el streaming, ¿qué prefieres?
Aunque no tengo un favorito, el cine siempre será mi casa porque ahí empecé y además tengo una relación personal con él porque desde pequeña he ido con mis padres cada fin de se- mana. Pero al mismo tiempo, le tengo mucho respeto al teatro porque es donde más aprendes como actor, donde realmente se ponen al límite tus habilidades y tu conocimiento.
15. ¿Dejarías la escena mexicana?
No del todo. He empezado a buscar oportunidades fuera, tanto en Estados Unidos como en América Latina en una búsqueda de nuevos personajes y aprendizajes, pero nunca abandonaría el trabajo en el país por completo.
16. Ya has tenido un crédito como productora, ¿te ves como directora o escritora?
Por el momento no, porque no creo tener la experiencia necesaria, pero la producción siempre fue un “plan B” para mí. Quiero aportar a la forma de hacer cine desde la creatividad y darle la facilidad a otras personas de contar historias.
17. ¿Qué piensas que le hace falta a la industria audiovisual nacional?
Atreverse a hacer cosas distintas. Hace falta explorar nuevas historias y perspectivas; nuevas formas de producir y de narrar. Falta abrir espacios para que nuevas personas aporten ideas a la industria y la nutran.
18. Y aparte del cine y la televisión, ¿hay algo más que te gustaría hacer?
La verdad no. Hasta ahora no ha surgido otra in- quietud profesional y me veo de lleno en esto hasta donde la vida me lo permita. Creo que lo más que me he aventurado fue cuando aprendí a tocar el saxofón alto.
19. Después de casi un año en cuarentena, ¿descubriste algo nuevo en ti?
Soy una persona privilegiada y la cuarentena no impactó de forma negativa como a muchas otras personas y aunque ha sido un momento oscuro para todos, a mí me permitió descubrir que soy más capaz de lo que creía: desde remodelar mi departamento con mis propias manos hasta empezar nuevos proyectos como productora de forma autogestiva.
20. ¿Hay algún proyecto que te gustaría hacer en el futuro?
¡Muchísimos! Me encantaría poder hacer un personaje de espía o detective, de esas mujeres líderes que son fuertes e inteligentes. También últimamente he pensado mucho en la maternidad y me encantaría, desde la actuación, explorar esa parte de ser mujer que es más compleja de lo que se cree.