Conoce a Luciana Fuster: la nueva sensación de las redes sociales
Con tan solo 21 años, Luciana Fuster se ha convertido en una de las influencers más destacadas de Perú y Latinoamérica, sumando más de 3.7 millones de seguidores en Instagram, su red social favorita, y 409 k en Facebook.
Su carrera empezó a muy corta edad y en medios más tradicionales, primero a los 14 años como concursante de certámentes de belleza y modelo, contactándo ella directamente a una agencia que la posicionara en la industria; posteriormente, a los 16, en concursos televisivos como Esto Es Guerra”, “Reto De Campeones” y “Combate”.
En entrevista para Playboy, Luciana Fuster explica que desde la primera vez que estuvo en set, se enamoró de la televisión:; “Mi mayor meta era llegar a la conducción y este año no solo surgió esa posibilidad, sino también una como locutora en el programa radial “El Bunker” en Onda Cero una de las estaciones más importantes de Lima, Perú.
Sin embargo, lo que Fuster no sabía es que el camino para este objetivo sucedería a través de las redes sociales: “Para mí, las redes sociales ahorita son todo. Es lo que te conecta con gente tanto de tu país como en el extranjero”, detalla.
Respecto a su trabajo en esta área, detalla que el secreto de su éxito es la autencidad, pues no solo es lo que espera encontrar el público, sino que en caso de que no sea parte de las redes de un influencer, los seguidores no tardarán en notarlo.
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Luciana Fuster: mucho más que una influencer
Actualmente, la modelo peruana trabaja en campañas importantes con distintas marcas y tiene contratos anuales con otras como lo son Adidas, Pandora, Huawei y Estée Lauder, entre otras. Dada su versatilidad, sus redes sociales muestran contenido relacionado a belleza, moda, tendencia, entre otras, lo que la ha colocado como una influencer entre los jóvenes latinos.
Pero lejos de quedarse aquí, Luciana ha explotado cada oportunidad que ha tenido frente a ella, lo cual incluye grabar una colaboración musical e incluso ser la cofundadora de un negocio de belleza: “Yo hago lo que me hace feliz, lo que me gusta mucho. Sus próximos proyectos incluyen explorar la actuación, en la cual ya ha tenido cierta participación, pero ahora busca enfocarse más en ella: “Todo el trabajo necesita un 100% de dedicación. Es todo un tema de enfoque y preparación porque a mí no me gusta aventarme a la piscina cuando no tiene agua”, comenta.
Aunado a esto, Luciana Fuster no solo utiliza sus redes sociales como su trabajo, asumiendo siempre la responsabilidad de estar informada constantemente para la creación de su contenido, sino también como una plataforma para ayudar a su comunidad y a las causas que le apasionan, como lo demostró durante las protestas por la investidura de Manuel Merino como presidente de Perú y las posteriores muertes de Brian Pintado e Inti Sotelo.
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Ante esto, surge la pregunta de cómo mantiene los pies en la tierra cuando a tan corta edad parece tener no solo una carrera exitosa, sino también una fama que pocos han conocido a los 21 años. Su respues es el apoyo de su madre, la persona que más admira: “Mi mamá es una mujer fuerte y siempre ha estado al lado de mi hermana y mío. Nos aconseja, pero al mismo tiempo respeta nuestras decisiones y es gracias a ella que he podido no solo triunfar en este camino, sino también hacerlo sin perderme en el camino.
Esto, sumado a la temprana madurez que Luciana Fuster debió desarrollar al empezar a trabajar a los 14 años, mientras sus amigas estaban en pijamadas o en el cine, es lo que le ha permitido a la celebridad no perderse en la fama del momento.
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Si bien los viajes no son una novedad para Fuster, ante la pandemia de coronavirus, los planes de viaje se han limitado. Sin embargo, aprovechó la invitación de unos amigos para conocer nuestro país e inmediatamente recibió mucho cariño de sus seguidores mexicanos: “No sabía que tanta gente de aquí me conocía y la recepción ha sido muy bonita, con mensajes de bienvenida, recomendaciones y mucho amor. La gente en general es muy amable, te hacen sentir el calor de hogar y eso es algo muy bonito”, detalla.
Si bien solo estará una semana espera poder conocer la Basílica de Guadalupe y probar toda la comida que pueda, aunque el picante no es lo suyo, pues tuvo una mala experiencia con una planta de ajil en la infancia, pero ella valientemente declara: “Aunque lo sufra, no me perderé la oportunidad de conocer la deliciosa comida del país. Eso sí, con un vaso de agua helada en mano”.
