Bella Poarch pasó de ser una chica aparentemente tímida en TikTok a convertirse en un fenómeno global, envuelto en talento, misterio… y varios escándalos. Con una imagen que mezcla dulzura, rebeldía y sensualidad controlada, Bella ha sabido cómo mantenerse en el ojo público —y no siempre por sus canciones.
Su salto a la fama fue con el video viral de “M to the B”, uno de los más vistos en la historia de TikTok. Pero tras la viralidad vinieron los titulares.
1. Su pasado militar:
Antes de ser influencer, Bella formó parte de la Marina de Estados Unidos. Algunas publicaciones y testimonios pusieron en duda partes de su servicio, lo que desató controversia. Aunque ella aclaró su historia, el juicio en redes no se hizo esperar.
2. Acusaciones de apropiación cultural:
Su uso de símbolos asiáticos mezclados con estética occidental provocó críticas por parte de algunas comunidades que consideraron su imagen como un estereotipo visualizado para el consumo mainstream.
3. El misterioso matrimonio secreto:
En 2022, documentos filtrados revelaron que Bella había estado casada desde 2019. Lo más impactante no fue el hecho, sino el silencio absoluto al respecto en sus redes. Al poco tiempo, solicitó el divorcio, dejando claro que incluso las estrellas virales guardan secretos que no caben en un reel.
4. Cirugías estéticas y estándares de belleza:
Ha enfrentado comentarios sobre su rostro “perfecto”, con rumores de procedimientos que nunca ha confirmado ni desmentido. Su respuesta: empoderarse desde la estética que eligió. Y eso, en sí, es parte del encanto.
Bella no solo genera escándalo: genera deseo, atención y conversación. Con cada look, cada pose y cada aparición, su imagen es una mezcla exacta de fantasía digital y actitud real. Y sí, también sabe ser provocativa con estilo.