TOP TEN: Ediciones del Super Bowl (y comerciales)

Con un deporte electrizante, espectacular, por su velocidad y su estrategia como esencia, el Super Bowl es ese súper evento donde se encuentra en el campo de juego, la gran expectativa que se refleja en un impresionante rating de 108.7 millones de televidentes en el 2013 (Nielsen) solamente en Estados Unidos. 

 

Es una inmejorable vitrina que cualquier anunciante puede proyectar al ritmo de cuatro millones de dólares por 30 segundos de pauta comercial –según se estima fue el costo en 2013- y es ese lugar en el que, cualquier aficionado – viajero del mundo, seguramente anhela encontrarse presenciándolo ahí, en el estadio que se designa cada año como sede.

 

La edición número XVLIII del Super Bowl tiene el atractivo de que podría ser un encuentro tan emocionante, como los que estamos a punto de platicarles.

 

Antes de cualquier rasgo histórico, debemos establecer un punto importantísimo, origen de esta entrega: todo lo que significa en sí el evento, encuentra un complemento potenciador en la siempre cosmopolita, encantadora y llena de glamour Nueva York, en su primera aparición en este evento de altas expectativas.

 

Con un Comité de Recepción, la Urbe de Hierro y su zona urbana, preparan su mejor faceta para hacer olvidar el frío a los visitantes, en una época del año donde tiene que seguir fluyendo todo en Manhattan y alrededores.

 

De Queens, de Brooklyn, del Bronx, de Nueva Jersey, de estados vecinos como Massachusetts, Pennsylvania, seguramente serán esos 16,000 voluntarios planeados, quienes –con al menos 18 años de edad- estarán en hoteles, estaciones de tren, aeropuertos y diversas sedes deportivas, para facilitar el tránsito de los aficionados al “Super Bowl” Boulevard, el cual estará en la famosa sede de los años nuevos: Times Square.

 

Por supuesto, estos voluntarios también estarán con la preparación para guiar a los visitantes a otras magníficas atracciones en Nueva York, debidamente incluidas en guías familiares, de cultura, de bares, de atracciones, bueno… por supuesto, hasta de shopping.

 

Para lo recién mencionado, el portal nynjsuperbowl.com estará operando con extensa información conducente para todo aquel quien busque información conducente. 

 

Consideramos como un ingrediente especial, que invita a la gran expectativa que genera este gran duelo de los campeones de la Liga Nacional (NFL) y la Liga Americana (AFL), el hablar de esos duelos épicos, donde los protagonistas dejaron su alma en el campo de batalla, y los aficionados dejaron en un alarido el mejor sello para ese desenlace memorable, el cual se fue para los anales de la historia.

 

 

Con esa atrapada justo sobre el casco del defensivo, el novel Eli Manning haciendo regresar a un equipo neoyorquino que se veía sin esperanzas con el 14-10 que recién les habían puesto en la frente, haciendo vibrar a un innovador Domo acondicionado en medio del desierto. Juego memorable coronado con la atrapada de Plaxico Burress de los Gigantes, a 35 segundos del final, para evaporar la perfección que buscaban los Patriots en ese calendario.

Dos líderes quienes por su demoledora capacidad ofensiva serían desde entonces históricos, se enfrentaron: Brett Favre (GB) contra John Elway (Den), y el encuentro de los entrenadores -alguna vez compañeros- Mike Holmgren y Mike Shanahan. Un juego parejísimo el cual parecía irse al temido tiempo extra, pero  John Mobley se convirtió en héroe, desviando un pase, evitando puntos y significando el desenlace dramático. La figura del juego fue Terrell Davis, corriendo para 157 yardas.

James Harrison (Steelers), poniendo en el rango de “inolvidable” esa intercepción de 100 yardas para convertirse en el jugador del encuentro, justo antes de la mitad del mismo, como para establecer una tendencia, pues la ventaja que estaban intentando obtener los Cardinals giró para un neurálgico Touchdown, ventaja que los Steelers ya no soltarían.

Queso era la palabra, porque los “cheeseheads” –aficionados a los Packers- festejarían a su propio Quarterback, el a la postre Jugador Más Valioso (MVP), Aaron Rodgers, con las jugadas de antología que lograría, al lanzar tres pases de anotación, con aportes defensivos de su compañeros Clay y Nick Collins, quien anotaría su Touchdown después de una intercepción de 38 yardas. En la historia de las tristezas Shaun Suisham, pateador de los Steelers, se metió a ese listado, fallando un gol de campo importantísimo para el juego, pues pudo acercar a su equipo a un punto.

Un juego de tal fuerza defensiva, el cual se encontraba con un hermético marcador de 3-3 para el medio tiempo. Faltaban emociones trepidantes, pues los Bengals habían tomado una ventaja de tres puntos (16-13) faltando solamente 3:20 de juego. Vendría a escena uno de los momentos más sublimes: el icónico Joe Montana (49ers) guiando 92 yardas en 11 jugadas y completando con John Taylor el pase que definió el encuentro. Sólo quedaban 34 segundos y se evaporaron… ¡victoria de San Francisco!

Aparecería Tom Brady (Patriots) con su primer éxito, ante unos Rams que llegaban sólidos. La férrea disposición táctica de los Patriots, con una defensiva prácticamente impasable, un adrenalínico regreso de intercepción del patriota Ty Lawpara llegar a touch down. La patada de gol de campo liquidadora, con Adam Vinatieri logrando para los Patriots un intento de 48 yardas, estableciendo el comienzo de lo que sería una era importante para su equipo, al ganar dos de los siguientes tres Super Bowl.

De esos finales que ni en el plano fílmico uno puede imaginar. Otra de las patadas que no se olvidan, por la tristeza al fallar Scott Norwood (Bills) un intento de 47 yardas con el reloj expirando… Con eso, los Bills no pudieron coronar su temporada, en un juego tan cerrado, que pocos quizá recuerden que Ottis Anderson (Giants) fue el jugador más valioso, debido a lo cerrado del choque.

Casi 26 minutos de forcejeo sin nada en el marcador, tuvo el giro tan inesperado como la falla que tendría la vestimenta de Janet Jackson para el medio tiempo del encuentro, al mostrar parte de su pecho. Una descarga energizante de 24 puntos para cerrar la primera mitad y los Patriots tomarían un liderato el cual aseguraron con las uñas, al concretar Adam Vinatieri (Patriots) la diferencia que sería definitiva: un gol de campo de 41 yardas, para el segundo campeonato de los “Pats” en tres temporadas.

Con la llegada del nuevo siglo y con un Kurt Warner liderando a los Rams, una edición de drama especial, pues el empate y posible sueño de prórroga, se quedó a centímetros de concretarse. Steve McNair (Titans) era un espectáculo jugando aún con sus lesiones, incluidas sus dolencias intercostales, pero Kurt Warner (rams) terminó llevándose el éxito, con justicia épica.

Probablemente el gran ícono de la rivalidad para muchos aficionados de la NFL de este lado del río, era este enfrentamiento clásico de la década de los Setentas. Observar a Roger Staubach (Cowboys) contra Terry Bradshaw (Steelers) parecía una garantía que no hizo más que confirmarse. Tan parejo el encuentro que una inocente falla en un pase para anotación, que después culminaría esa ofensiva con un gol de campo fallado, fue lo que hundió las pretensiones de los Cowboys, para la victoria de Bradshaw y los Steelers.