Así hablaba José Sulaimán

La verdad que en lo personal no había conocido un personaje con tanto poder y tanta amabilidad. Muchas cosas se hablan de él por sus manejos del box y sus relaciones dudosas con promotores, pero esto es una realidad: en 40 años supo la llevar la transición del box a la modernidad. Siendo uno prácticamente un desconocido para él, nunca se negó a una charla de cinco minutos e incluso atendía llamadas en su domicilio pasadas las 10 de la noche. Nunca se negó.

 

Todo un personaje sin duda, el hombre más poderoso del box, a los 82 años por fin se fue a la lona en Los Angeles víctima de una afección cardiaca. De voz pesada, las anécdotas con él resultaban infinitas. Preocupado por el pugilismo clásico, el fajador, el de los hombres y no de las estrellas, ahora recordamos esta entrevista que tuvimos la fortuna de tener con él a finales de 2012, cuando se hablaba de la crisis de credibilidad del box ante decisiones “dudosas” de los jueces.

 

 

-El problema del boxeo es la lucha por el monopolio. La intervención de grandes corporaciones, algunas de la televisión norteamericana principalmente, que tratan de sacar al boxeo de lo que es lo normal para llevárselo al espectáculo para lo que ellos quieren, y con quien ellos lo quieren. Para ellos no hay buenos o malos boxeadores, sino hay quien le cae bien a los teleespectadores.

 

-El problema es que el mundo del boxeo ha cambiado. Ahora lo que quiere el campeón mundial es dinero y, por dinero, él y su promotor hacen lo que sea. Yo no creo que el Consejo Mundial haya perdido poder, pero sí ha sido puesto en una gran batalla, que estamos peleando todos los días, porque no podemos permitir que fuerzas extrañas, económicas, traten de pisar la seriedad, las reglas y la justicia en el boxeo.

 

-Yo pienso que si no se imponen métodos estrictos y se envía el boxeo por lo que es correcto, tradicional y reglamentos, el boxeo va a morir como deporte en no más de 25 años y se va a convertir en un espectáculo de la televisión. Por eso el Consejo Mundial estamos luchando muchísimo.

 

 

-Queremos reunirnos con todos los promotores en la comisión del Consejo Mundial y ponerles las condiciones de que no pueden dirigirse solamente a donde está el dinero, sino donde están las reglas que llevan a los muchachos a ser campeones. Ellos, cuando llega un campeón, se lo roba; llega otro, y se lo roban. Creo que el tiempo ya llegó de imponer condiciones.

 

-Pienso que es triste, porque la mala administración se ha opuesto a lo que debe de hacerse. Pienso que debe haber un cambio radical en el futuro. Tenemos que buscar el matrimonio del boxeo profesional y el aficionado. Tenemos que hacer que el profesional evite que ingresen los grandes prospectos, porque actualmente los debutan en ranchos y, como es profesional, ya no puede pelear. El hacedor de campeones le tiene miedo a que se lo roben en la federación, como siempre ha sucedido. Queremos hacer un plan nacional, donde ya no haya una dictadura y se haga un torneo de costa a costa y frontera a frontera, por municipios y estados. Que haya en México un Gimnasio Nacional de Boxeo, que se traigan al país de los tres o cuatro grandes entrenadores que hay, tenerlos por un año y que enseñen todas las características importante de un boxeador, en especial del amateur. Buscar peleadores donde haya, podemos encontrarlos. Tengo confianza en que alguno de nuestros muchachos gane una medalla.

 

-De ninguna manera. Eso es ejercer un monopolio que no le van a permitir las leyes del mundo. Eso es decir: “vente a pelear conmigo por dinero y yo te prometo que irás a los Olímpicos”, contra todos los otros del mundo que son profesionales. No creo que tengan éxito. Además, ellos (la AIBA) son completamente novatos, no saben de qué se trata esto. Acaban de hacer un torneo en varios países del mundo, que fue un rotundo fracaso. Boxeadores que no tenían valor, pero ¿como fueron, ya pueden ir a juegos Olímpicos? ¡No puede ser! El Doctor Wu, el presidente de la AIBA, no conoce de boxeo. Es una persona que lo que quiere es meter el box profesional en la AIBA, porque hay dinero. No han podido responder correctamente a la acusación que les hizo la BBC de Londres sobre que ellos recibieron 10 millones de dólares de una empresa, no los pueden explicar. Yo creo que van a tener problemas.

 

-No, porque el boxeo profesional, desafortunadamente, compite en otro terreno. El amateur es diferente. Aquí se le ha puesto atención al boxeo selectivo. Van a un gimnasio, encuentran a un muchacho que sabe pelear, y se lo traen. No hay competencia, no hay torneo. Si hiciéramos un torneo nacional, tendríamos un mínimo de 20 mil boxeadores amateur.