Conoce la sensualidad de Miss Mara, la DJ que te hará vibrar
Hace casi 17 años que Miss Mara comenzó su carrera como DJ. Hoy, para celebrar, es parte de la historia de Playboy México con un catálogo de fotos que te harán escucharla de cerca.
¿Cómo surge tu carrera?
Mi carrera surgió antes de empezar a tocar. A los lugares a donde iba solo pensaba “por qué nadie pone la música que escucho”. En esos años no había tanta tecnología y a los 18 me fui a vivir a la playa en donde conocí nueva música y busqué lugares en donde me pagaran por practicar.
¿Qué tan difícil ha sido como mujer, abrirte paso en el mundo de las tornamesas?
Es más fácil ser mujer DJ en realidad. Yo creo que el camino machista siempre estará en cualquier área seas músico, abogado y hasta astronauta, siempre habrá alguien que querrá bloquearte en términos de género pero hay que sacarle provecho mostrando una buena propuesta femenina.
¿Cuál es el lugar más extraordinario a donde te ha llevado la música?
Cuando fui a tocar a Japón y no porque haya sido la mejor sino porque fue un momento de autorreflexión, me dijo “Órale que estoy tocando aquí”. Y otro lugar personal es el conectarme con tanta gente al mismo tiempo, eso es super valioso.
Le Twins, más que un set de DJ
¿Crees que eres pionera de las DJs en México?
En México 100%. Empezamos pocas, lo hicimos muy bien y seguimos luchando. Ha sido impresionante ver el camino de esas 3 que empezamos y ahora ver a miles de DJs de todo tipo y hay público para todas.
Ver esta publicación en Instagram
¿Cuáles son los DJs que más admiras?
Honey Dijon, pues es una mujer trans que tiene un gran poder en el escenario y eso es algo que admiro mucho en el escenario más allá de la buena selección musical. También Los Martínez Brothers, unos chavos del Bronxs que cuando tocan se divierten un montón entre ellos y también lo transmiten.
¿Para ti qué significa Playboy?
Poder. Siempre he sido lectora de la revista, sobretodo en el mood que tiene últimamente. Más allá de una revista sensual, es un espacio de empoderamiento.
