5 mitos sobre los chilaquiles

Se acerca el fin de semana y con ello, la necesidad de desayunar chilaquiles. Hayas o no bebido la noche anterior, pocas cosas se comparan con el placer de saborear unos reparadores chilaquiles con un café.
Nuestros amigos de La Cura, un emprendimiento independiente que se definen como un culto secreto al chilaquil (si existe una religión que adora al Gran Monstruo de Espagueti Volador, ¿por qué algunos de nosotros no habríamos de ser fieles devotos de la Iglesia del Chilaquil), nos ayudaron a clarificar algunos mitos existentes alrededor de este platillo típico al que hemos recurrido en caso de emergencia.
1 Los chilaquiles se sirven crujientes
En realidad, los chilaquiles se comen como TÚ prefieras. Hay quienes los prefieren “duritos” y hay quienes se los comen mejor si están remojados. En La Cura se pueden pedir de ambas maneras. Como si fuera un corte de carne “término medio” o “bien cocido”.
2 Todos los chilaquiles engordan
No necesariamente. En La Cura se sirven tres tipos de tortilla: la amarilla, la azul y la de coliflor, que es tipo Keto. Pretextos no hay.
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3 O son verdes o son rojos
A nadie nos gusta que nos pongan límites. ¿Por qué sólo tendríamos que elegir entre dos opciones de chilaquiles? En La Cura también hay salsas de chile morita y ¡agárrate!… de frijol con chipotle. Para resacas extremas, esta última.
4 No son para veganos
¡Momento! Además de contar con proteínas tan variadas como milanesa de res y pollo, pastor, cecina, suadero y cochinita, para quienes no comen carne, La Cura tiene a su disposición setas preparadas y chorizo vegano. Como buena religión, es para todos.
5 Necesitas estar crudo para disfrutarlos
En realidad no, ni tampoco son un platillo exclusivo para el desayuno. Si no quieres chilaquiles, en La cura puedes pedir unos molletes con pastor o si tu pasión por el platillo llega al límite, unos molletes CON MÁS CHILAQUILES.
Para solicitar tus pedidos, conéctate a su Instagram. Trabajan viernes, sábado y domingo para que te recetes, dijera Robert Smith, The Cure para tus males.
La Cura Chilaquil es, en palabras de sus creadores, “un club secreto de culto al chilaquil que funciona como una botica antigua, en la que la alquimia está al servicio de la cocina”.
Dátelos.