Lincoln persigue a los primos de Drácula

Notables efectos especiales se disfrutan mejor en la versión 3D de la película Abraham Lincoln: Cazador de Vampiros, basada en la novela Seth Grahame-Smith y producida por Tim Burton, que se estrena este viernes 31 de agosto.
Por Grissel González
Los invitados llegaron a tiempo, algunos ya tenían preparado los snacks para disfrutar de la cinta Abraham Lincoln. Cazador de Vampiros. No se hizo esperar mucho, luego de media hora, finalmente abrieron las puertas de las salas. Todo el mundo entró corriendo para ocupar un buen lugar. Unos minutos después de las ocho de la noche, empezó la premier de la película que se estrenará este viernes próximo 31 de agosto, con 650 copias, en formatos de 35mm, Digital, 3D y 4DX.
Para alegría de los asistentes, comenzó la proyección de la película en la que actúan Benjamin Walker (Kinsey) y Dominic Cooper (Capitan America: The First Avenger, An Education), bajó la dirección de Timur Bekmambetoy (Wanted The Irony on Fate, Day Watch, Night Watch) y producida por el famoso Tim Burton, quien se caracteriza por incluir en sus películas elementos góticos y oscuros. Y este filme no fue la excepción, cuyo guión está basado en la novela de Seth Grahame-Smith, que combina los géneros de terror y ficción.
Saltos en las butacas
La gente disfrutó los efectos especiales resaltados en 3D, ocasionando uno que otro salto de las butacas por el elaborado montaje interno que nos trasporta a la época. Por casi dos horas, se disfrutó de las secuencias envolventes, en las que se muestra un lado siniestro del contexto esclavista de Estados Unidos.
La historia hila la idea original de Abraham Lincoln de pronunciarse por la abolición de la esclavitud, pero con un toque de misticismo explicado por la cacería de vampiros que el presidente protagoniza por las noches. En su inquietud por formar una familia, Lincoln se ve obligado a tomar las armas de plata para matar vampiros en vez de dedicarse a la diplomacia. Así, lucha por una nación de hombres libres, de monstruos, lo que da pie a una interpretación de la Guerra Civil.
Al concluir la cinta, los asistentes se fueron alejando de la realidad tridimensional. La mayoría se mostró satisfecha. Al final, cuéntese como se cuente, la historia sólo es un fragmento de la verdad y el espectador decidirá formar o no parte de esta historia y explorar la vida secreta del decimosexto presidente de Estados Unidos, como verdugo de los vampiros.