Compartir
Suscríbete al NEWSLETTER

#LIBROSALDESNUDO EL LENGUAJE: CAUTIVO DE LA MEDIOCRIDAD HUMANA

Por: Playboy México 05 Jun 2018
Jaime Garba @jaimegarba   No pocas veces he abierto libros contemporáneos y tras algunas líneas me detengo para meditar cómo […]
#LIBROSALDESNUDO EL LENGUAJE: CAUTIVO DE LA MEDIOCRIDAD HUMANA

Jaime Garba

@jaimegarba

 

No pocas veces he abierto libros contemporáneos y tras algunas líneas me detengo para meditar cómo es posible que un autor formule oraciones con un español que supera los límites de la sencillez, pareciendo que trata de comunicarse con otra especie y no con un ser humano que está posibilitado de entender la lengua que le pertenece innatamente tanto como a los eruditos, académicos, escritores o defensores incansables del español. El escritor israelí David Grossman en su ensayo “Los libros que me han hablado”, comenta sobre lo molesto de la mediocridad del lenguaje en algunas literaturas: “actualmente la mayoría de los libros… están escritos bajo la vulgaridad; en la mayoría de los libros se da prioridad a los términos simples, incluso simplistas, es decir, a la jerga…”

El problema se encuentra vivo en la vasta obra que se publica diariamente, donde la arquitectura del lenguaje es despreciada y cambiada por estrategias narrativas que buscan captar clientes (no se les puede llamar lectores); estos libros son tan efímeros como un parpadeo y su construcción gramatical es tan débil que las mentes de quienes la consumen no retienen ni un ápice de las cientos de páginas, apenas sintiendo un placer parecido al de consumir un pastel que no nutre pero sí engorda. Lo peor es que también castigamos al español en nuestra cotidianidad; la carencia del sentido del lenguaje demostrada por nosotros, ingenuos parlantes, nos aprisiona no en un silencio tortuoso sino en una celda de ruido ininteligible que tergiversa nuestra manera de comunicar. ¿Será una cosa de época, de un tiempo vertiginoso donde las culturas se mezclan entre sí, donde la tecnología ha cambiado las reglas de interacción social y donde el lenguaje se extrapola a otras maneras de decir las cosas vedando a la palabra la relevancia que ha tenido desde que el hombre ha podido articular más que un sonido gutural?

Cuán terrible es lacerar el español, tenerlo cautivo quitándole el oxígeno, aniquilándolo poco a poco, pensemos que entre menos uso hagamos de él correcta y acertadamente, nuestra cognición irá alejándose del significado y del sentido de la palabra, derivando en una involución catastrófica que augura retroceder a tiempos donde el diálogo era el puño, la lanza atravesando el pecho y el grito y la muerte. Si no me creen abran sus redes sociales y contemplen la tragedia, las nuevas generaciones comunicándose entre ellos en un grotesco lenguaje que no puede llamarse español, mutilando palabras, travistiendo letras, negando el daño que le hacen al idioma, pero peor aún, a sí mismos, sin pensar que la vía fácil para decir algo es en realidad la imposibilidad de transmitir con poder un mensaje, un sentimiento o un pensamiento.

Cuando me preguntan por qué tengo tatuado el logo de la RAE en el brazo, solía aprovechar para compartir mi discurso de preservación del español, aclarando siempre que no me considero un docto o un perfecto aplicador de la palabra, pero que tenerlo en la piel me hacía recordar ese respeto y admiración por mi idioma, por la posibilidad de decir algo de mil maneras distintas, a diferencia de muchos otros lenguajes; pero la pasión vertida en mi argumento no servía, no lograba convertir a los demás en adeptos, así que ahora prefiero contar una historia inventada de ese símbolo que llevaré hasta mi muerte, sin que muchos lo pongan a duda puesto que es algo que no les dice nada, es una mancha de tinta, como cualquier otra.

El poeta mexicano Vicente Quirarte explicó el suicidio de su padre de la siguiente manera: “se suicidó en el momento en que ya no pudo escribir”, apoyándose de las palabras de Kurt Cobain, el vocalista de Nirvana: prefirió “incendiarse a borrarse” (“I dont have the passion anymore, and so remember, it´s better to burn out tan to fade away”). Si todos los hispanoparlantes sintiéramos por lo menos un cuarto del mismo honor y pasión que Martín Quirarte sintió por la palabra, la situación del español no sería tan grave. Lo que nos queda entonces es no cesar en el derrumbe de esa prisión invisible, en la liberación de la madre que nos dio nuestra voz: el español.

Este video te puede interesar

Te recomendamos
Foto perfil de Playboy México
Playboy México El Placer de Vivir Somos una marca reconocida mundialmente, el conejo nos representa. Entretenimiento, contenido relevante y todo aquello que emociona a hombres y mujeres.
Descarga GRATIS Calendario Revive el Poder 2024
Calendario
Descarga AQUÍ nuestro especial CALENDARIO REVIVE EL PODER 2024.
Suscríbete al Newsletter
¡SUSCRÍBETE!
¿QUÉ TEMA TE INTERESA?