Los deportes en conjunto más violentos del mundo
Un repaso por las disciplinas en las que los golpes, los empujones y la rudeza, lejos de ser innecesaria, son parte de las reglas.
El deporte ha sido desde sus inicios una actividad en la que es necesario pensar y, casi siempre, conocer el uso adecuado del cuerpo. Sin embargo, a lo largo de los años algunos se han convertido en verdaderas batallas campales semicontroladas en las cuales sólo los más aptos físicamente destacan y, sobre todo, sobreviven.
Lo primero que debe quedar claro es que los deportes de contacto físico son espectáculos de violencia regulada que cuentan con reglas y árbitros que las aplican. Aclarado ese detalle, aquí algunos de los deportes de conjunto más violentos que existen:
RUGBY
Se juega sobre un campo rectangular con 18 personas por lado, con un balón ovalado, con protección mínima (sólo se permiten protecciones de máximo 5 mm de espesor tipo rodilleras o una especie de pechera blanda y un breve casco), a dos tiempos de 40 minutos y con la idea de que el equipo que anote más puntos, gana. El balón no se puede lanzar hacia adelante pero se puede avanzar con él o patearlo, aunque es justo ahí donde viene lo violento: Los oponentes pueden bloquear y tacklear a quien lleve el ovoide, lo que en ocasiones provoca que 15 ó 20 jugadores se arremolinen unos contra otros para derribar a quien lleva el balón. En esas melés hay más golpes que en algunos encuentros de box. No obstante, amoratados, sangrados y lesionados, los jugadores de los dos equipos suelen reunirse en un llamado “tercer tiempo” en el cual se abrazan unos a otros, conviven y platican sobre las incidencias del juego.
HOCKEY SOBRE HIELO
En sus reglas parece bastante inofensivo pero en niveles profesionales algunos aspectos del juego, como “la carga”, son violencia pura. Por definición se trata de impedir que el rival se escape con el puck o interrumpir el juego de ataque; en la práctica favorece contactos brutales cuando el jugador que lleva el puck está por ejemplo contra el muro de contención y la carga se convierte más bien en un virulento ataque en el que la persona es golpeada por un contrincante y aplastado con la barda. Además las peleas son comunes y los árbitros no las detienen hasta que alguno de los rijosos cae al hielo para evitar, ahora sí, lesiones más graves que podrían suceder con las hojas de los patines. Otros elementos que hacen del hockey un deporte violento son el puck, pastilla de caucho vulcanizado de 2,5 de grosor y 170 gramos que alcanza sin problemas velocidades superiores a los 100 km/h, palos de madera que bien pueden ser usadas (indebida- mente, claro) como armas y los mencionados patines.
LACROSSE
Su versión masculina es el juego de conjunto más antiguo de América del Norte. El Lacrosse sobre césped incluye dos equipos de diez jugadores cada uno. La competencia consiste en proyectar una pequeña pelota de goma en el arco del equipo contrario para lo cual se usa un palo con una red en la parte superior. Hasta ahí parece inofensivo, pero está permitida la violencia hacia el contrincante tanto con el cuerpo como con el palo, aunque tiene ciertos límites: Son ilegales los golpes desde el lado ciego y cuando el jugador a golpear esté agachado y con la mirada hacia el piso. Protección bucal, coderas, guantes y casco son obligatorios; protección para las costillas, hombreras y rodilleras son opcionales.
WATERPOLO
Probablemente no parezca muy violento, sobre todo porque el agua agitada esconde muchos detalles. En esencia es un deporte tranquilo, de impresionante requerimiento físico (los jugadores no pueden apoyarse en el piso) que obliga a los nadadores a mantenerse a flote durante 32 minutos y que, al ser arbitrado desde fuera del agua, esconde mucho contacto. Algunos “detalles” que suelen escaparse a los árbitros son golpes en los genitales, pezones retorcidos, puñetazos y patadas. Uno de los incisos del reglamento en España indica en el rubro “expulsiones graves sin cambio” que merecerá salir del juego aquél que, entre otras cosas “propine golpes fuera del agua”. Así las cosas, ojos que no ven, árbitro que no marca y violencia que no se registra.
ROLLER DERBY
En la práctica, las mujeres nunca han sido un sexo débil, pero la frase, el mito, la condescendencia se perpetuaron y el dicho se convirtió en lugar común. Hay un deporte que muestra que no sólo no son débiles, sino que pueden ser rudas. El Roller Derby nació en Estados Unidos y se desarrolla sobre patines tradicionales alrededor de una pista ovalada rodeada por un barandal acolchado. Durante sesenta minutos dos equipos compiten con el objetivo de anotar más puntos. Hasta ahí parece cualquier cosa, pero una parte importante del juego implica que las jugadoras intentarán empujar a las oponentes fuera de los límites de la pista. Para ello se prohíbe el contacto con manos, codos, cabeza, pies, por encima de los hombros o debajo de la mitad de los muslos o por detrás, sólo por los costados o por el frente de las jugadoras y aún así, al desplazarse sobre ruedas y a gran velocidad, los bloqueos son en realidad violentos aventones que a menudo terminan en fracturas, dislocaciones y en el mejor de los casos, fuertes golpes. Basta revisar el equipamiento de seguridad obligatorio para darse una idea de lo violento del deporte: Muñequeras, coderas, rodilleras, protectores bucales y casco. Otros aditamentos como shorts acolchados, protectores de barbilla, soportes para rodilla o tobillo, espinilleras, protectores de coxis y máscaras de cara completa son opcionales y se pueden usar siempre y cuando no interfiera con el desempeño de las demás patinadoras. Bellas mujeres con poca ropa patinando a gran velocidad tratando de golpear a otras, todo un sueño violento hecho realidad.
FUTBOL AMERICANO
El deporte más visto en Estados Unidos, la joya de la corona deportiva de los vecinos del norte y quizás el deporte de contacto que más auxilio tecnológico tiene en su favor para prevenir accidentes serios, es sin embargo el juego que más lesiones de cabeza, cuello y hombro arroja cada año. Hay deportes como el Basquetbol que provocan mayor cantidad de lesiones generales, pero es también practicado por el doble de personas. Cada año la NFL agrega más restricciones de contacto para evitar lesiones severas y a largo plazo como concusiones cerebrales, y eso provoca que cada vez alguien se queje de que ha dejado de ser un juego viril de contacto. Nada más alejado de la realidad. A pesar de la extensa parafernalia de protección de los jugadores el llamado tocho se mantiene como un deporte de contacto de exigencia máxima y violencia extrema. La diferencia con los demás es que hay muchos más ojos pendientes de cada golpe, hay cámaras de video por todos lados y se permite detener el juego para revisar que la violencia generada esté dentro de los límites permitidos. Indiscutiblemente es un deporte hermoso, pero ciertamente es muy peligroso. Claro, siempre hay algo que va un poco más allá…
CALCIO STORICO
También llamado Calcio Florentino, este deporte es considerado una forma primitiva del futbol. El rotativo catalán El Periódico publicó una larga nota en 2015 en referencia a este deporte, y en parte del cuerpo de la nota citaba que “la aparición de este deporte sin piedad, donde vale todo, donde el único objetivo es parar, derribar, placar, dañar, frenar, obstruir, patear, pisotear, noquear, aniquilar al adversario mien- tras uno o dos de los tuyos, no más, se preocupan de llevar la pelota a la portería se remonta, dicen, a la civilización romana como una practica más para mantener en forma a los soldados. De ahí, tal vez, que los 27 jugadores se distribuyan en la arena de Santa Croce en cuatro líneas, imitando la formación de la legión romana”. Lo cierto es que hay ocho árbitros que cuidan que la violencia no se salga de control ya que están prohibidas las patadas a la cabeza, los golpes por la espalda y que más de una persona golpee a quien lleva el balón. Se cree que el juego existe desde el Siglo xv, que perdió popularidad en el xvii y fue re introducido en 1930. Participan cuatro equipos y cada uno representa un cuarto de la ciudad de Florencia: Los azules son de Santa Croce, los rojos de Santa María Novella, los Blancos de Santo Spirito y los verdes de San Giovanni. Los equipos juegan dos semifinales la tercera semana de junio de cada año y los ganadores se enfrentan en la gran final el 24 de ese mes. La cancha es la plaza central de Florencia que se cubre de tierra. Al final, el equipo ganador se cubre de sangre, sudor, moretones, gloria y lodo. ¿Su premio? Una comida gratis.
