#LibrosAlDesnudo: Todo es literatura menos la literatura
Ya saben que mi falta de amor por los intelectuales es más que obvio, pero se justifica, y espero lo entiendan, porque no concibo que el pensamiento sea hermético. ¿Qué caso tendría crear y aprender, si a fin de cuentas nos dicen que lo divertido no tiene cabida con los temas de trascendencia? Ninguno, diría yo, porque el mundo de las ideas no debe estar supeditado a una visión gris, ni al silencio, debería el conocimiento, por su propia naturaleza ser una explosión de colores y un potente sonido melódico que se escuchara en todos lados. Al no ser así, no hay por qué extrañarse de que poca gente disfrute de las manifestaciones artísticas o no esté al tanto del día a día de lo que concierne a nuestra sociedad.
Por Jaime Garba (@jaimegarba)
Desde mi perspectiva ha sucedido con la literatura, he sido víctima de bullying literario al no haberme formado bajo el canon sagrado de los libros autorizados. Nunca fui digno, ni lo seré, de estar frente a los sacerdotes de Delfos para que me auguren el premio Cervantes o mínimo el Poniatowska de novela. No obstante eso me hace feliz por el simple y sencillo hecho de que me libera; y sé que no estoy sólo, como yo hay otros locos que creemos en el placer de los libros por igual que cualquier otro, sin importar lo grande o pequeño que sea; existimos quienes no acatamos las leyes dictadas por los sabios y nos negamos a guardar ese grito de gozo que nos causa un abuena historia. Jamás podríamos pertenecer a esa estirpe porque nuestra naturaleza es diferente.
Dicho lo anterior, y alejado de solemnidades, esta ocasión pensé en compartir aquello que es literatura sin ser literatura, o sea, contenidos que giran en torno a los libros pero que no son libros sino sátiras, acercamientos, alusiones, interpretaciones y versiones libres y creativas capaces de abrir los ojos al más obtuso y espero, por lo menos, de convencer a alguno de que a veces la literatura está donde menos lo esperamos. Todo es poesía menos la poesía. Todo en la vida es poesía menos la que se jacta de serlo. Durante décadas pseudo poetas han tratado de escribir teniendo como consigna la imitación de vates que fueron privilegiados con la escritura de versos bizantinos, sonetos, liras y haikus; dando como resultado poesía absurda y sin contenido, laberintos lingüísticos que suenan “bonito” pero que no aportan nada al diálogo cotidiano del hombre. Dándose cuenta de que aunque todos hablan de ella nadie sabe exactamente lo que es, un grupo de jóvenes españoles crearon “Todo es poesía menos la poesía” una especie de cápsulas en video donde abordan el complejo pero maravilloso mundo de este género literario, y lo mejor de todo es que lo hacen desde una línea cómica y amena. En cada capítulo teniendo como eje central ¿qué diablos es la poesía? se lanzan a diferentes lugares como mercados, parques y museos; de la mano de gente común y corriente y no con los poetas que todo lo saben y lo que no se lo inventan, y van construyendo un concepto de poesía que da espacio a todos los elementos que nos rodean. Es grato darnos cuenta de que hay millones versos por doquier.
Vida de escritores
No hace falta ser tan creativos para traer a la mente la imagen del escritor aburrido y solemne, y aunque evidentemente no sea un cumplido, muchos autores se esmeran en conservar esa estampa arrogante y pretenciosa, pero… el gran pero, es que como seres humanos no están ajenos a las vicisitudes de la vida. Esto lo sabe “Vida de escritores” un blog del escritor Francisco Serratos dedicado a sentar cabeza a aquellos escritores que andan volando alto. Esto no lo hace por medio grandes lecciones sino a través de recopilar algunas de las manías, hechos, formas de actuar y situaciones chuscas cotidianas.
En este blog se apagan egos y se evidencian realidades en presentaciones de libros, nuevas publicaciones, en relaciones de amor-odio entre autores, o el fantasma de la soberbia que pesa sobre varios que en vez de subirlos al trono del reconocimiento los baja al piso de la burla. El blog es una carcajada constante pero aún más, es el recordatorio de que el traje de etiqueta no cabe en la literatura.
Afortunadamente en la web y en otros lares hay gente convencida de que todo es literatura menos la literatura, que en el día a día se puede encontrar ese amor y esa pasión por la palabra y las buenas historias. Ya sea en el baño, el metro o el microbús, mientras se camina o se hace fila en el banco, cualquier instante será buen momento para encontrarle literatura a la vida.
